El juez considera que no se ha probado que la madre de Diego mendigara con él y se lo devuelve
El titular del Juzgado de Primera Instancia número 6 de Salamanca, Luciano Salvador Ullán, ha entregado la custodia de Diego, de cuatro años y conocido como "el niño de El Royo", a su madre biológica, Margarita Bernal. La progenitora, enferma mental, la había perdido después de haber sido descubierta mendigando junto a su hijo en el Metro de Madrid. Sin embargo, el juez considera que este hecho no ha sido probado.
El auto determina que "no existe indicio probatorio alguno de que el menor mendigara en el Metro de Madrid" en compañía de su madre, Margarita Bernal, que sufre una transtorno bipolar de la personalidad. Para el juez, "la única intervención policial fue el traslado del menor del centro de protección de la CAM 'Isabel Clara Eugenia', desconociendo los agentes si con anterioridad pudo estar pidiendo en la calle".
A este respecto, el juez se extiende en unas amplias consideraciones sobre el ejercicio del derecho fundamental de información, "que conlleva inexcusablemente el presupuesto de veracidad". Por ello resalta, en relación con este caso, y en particular al episodio de Madrid que determinó el actual acogimiento residencial del menor, que información veraz "significa información comprobada, según los cánones de la profesionalidad informativa, excluyendo invenciones, rumores o meras insidias".
El magistrado Salvador asegura en sus conclusiones que "en momento alguno ha habido incumplimiento intencional por la madre de sus deberes de guarda respecto a su hijo"; que "no se ha producido un abandono por Margarita de su hijo" y que "la situación de desamparo fue adoptada sin la valoración del riesgo del menor en que pudiera encontrarse y sin el necesario informe social de la paciente".
El juez recalca que su decisión de que no prosperase el acogimiento con fines preadoptivos que disfrutaba el menor, en una familia de El Royo (Soria), antes de que fuese devuelto a su madre biológica "no tuvo causa en una medida terapéutica para la madre, por lo que es una falacia cualquier información en este sentido". "Las resoluciones de este Juzgado, de la Audiencia Provincial y del Tribunal Constitucional siempre tuvieron en cuenta el interés prevalente del menor", añade.
El estado del niño
Diego Lucas Bernal fue entregado en régimen de acogimiento con fines preadoptivos, a los pocos meses de nacer, a una familia de El Royo (Soria), debido a las enfermedades mentales de sus padres, a los que la Junta de Castilla y León retiró la tutela. Posteriormente, la madre biológica recurrió esta decisión y el juzgado de instrucción número seis de Salamanca decidió en octubre de 2000 separar al niño de su familia adoptiva e ingresarle en un orfanato de esa ciudad para que estuviera cerca de su madre, a quien se le estableció un régimen de visitas.
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