Aqui, ni Vd es Agamenón si su porquero, Vd es el cerdo capaz de engullirse a los niños.
En este caso lo dices tu, Gasparín, que no solo eres el porquero del gobierno, eres su comepollas.
Osá: Que si el Congreso decide por amplia mayoría establecer la esclavitud, diga lo que diga la Iglesia o el sursum corda, el comprar o vender esclavos será un derecho de los ciudadanos libres y democráticos.
(No sé si Agamenon coincidirá con esta postura. Su porquero seguro estoy que no ha dicho ni mú, ergo, los que así hablan son los apacentados)
Chssss, habló la luminaria de Occidente, chsssss, que no se acuerda el pobre del juramento hipocrático, está muy mayor el pobre, chssss...
hombre, por ese mismo razonamiento el hombre tendria derecho a suicidarse y sin embargo la ilustrisima camara (anclada en el terciario)a la que ud. pertenece, lo prohibe con la privación de libertad, es decir la carcel
Y el tal Llamazares es más moderno, ha superado la Edad Media. Pero no llega a novísimo, pues no es de este tiempo, sino de la época de José, papa Stalín. O sea un ... mejor dejarlo y no llenarme la boca de mierda.
La Iglesia cuando avisa no es traidora. Hablará y después callará respetando la libertad de los ciudadanos. Unos actuarán de acuerdo con su conciencia bien formada en la verdad, y otros actuarán con forme a lo que les dicte la mentira. Pero la verdad siempre saldrá a relucir, porque es tozuda, y golpeará de la manera más inesperada a los que hayan actuado contranatura. Lo ha hecho siempre en el pasado, ahora y lo seguirá haciendo en el futuro, porque la verdad siempre sale triunfando, y la naturaleza nunca perdona cuando se la maltrata.
La introducción en la reforma de la ley del aborto de la "biología mágica" por la que un ser vivo se transmuta milagrosamente en ser humano en un instante concreto choca contra el racionalismo y la evidencia científica y se adentra en el proceloso mundo de las creencias contrarias al evolucionismo. El "soplo de vida" que convertiría a un ser vivo de naturaleza semejante a una trucha,una flor o un árbolillo en ser humano no está sustentado en ninguna evidencia médica ni biológica, que de modo unánime afirman el "continuum" evolutivo del ser humano nonato. Incluso nuestro código penal considera como mismo delito la destrucción de una planta protegida o la de sus propágulos. Los países que introducen o mantienen la pena de muerte aceptan su responsabilidad sin esconderse detrás de simplonas teorías filonazis sobre la naturaleza humana de los condenados