
L D (EFE) Gordillo, que dirige en La Granja (Segovia) un curso sobre el menor ante el Derecho Penal, organizado por la Universidad San Pablo-CEU, aseguró que ante los casos graves donde hay menores implicados hay que buscar "medidas con más eficacia y que satisfagan a la víctima, además de conseguir que el menor no vuelva a delinquir".
Tras asegurar que se podría tender a medidas como la que se aplica en casos como en el terrorismo, donde el internamiento se eleva a un máximo de 10 años, el fiscal sostuvo que estas sanciones "han dado un resultado importante" en hechos vinculados a la "kale borroka" o violencia callejera en el País Vasco. A su juicio, "gracias a estas medidas" para los menores de 18 años, la violencia callejera ha desaparecido en el País Vasco, salvo casos excepcionales.
Preguntado por la reciente sentencia a un menor de 14 años que asesinó y agredió sexualmente a una niña de 13 en Orihuela (Alicante), Gordillo manifestó que "medidas de cuatro años de internamiento y tres de libertad vigilada para mí, tras dos violaciones y un asesinato, me parecen un tanto ridículas e ineficaces". Según Ignacio Gordillo, "estas personas no pueden ser puestas en libertad en cuatro años, porque en ese tiempo hay un pronóstico muy posible de que vuelva a cometer hechos de esa índole, con lo cual habría que aumentar las medidas, el internamiento y sobre todo que sea eficaz".
Caso Orihuela
El fiscal de menores de la Audiencia Nacional insistió sobre el caso de Orihuela" que, cuando esta persona esté en libertad, dentro de cuatro años, "es enorme el agravio para las víctimas y para los familiares, sobre todo no habiendo ni reparación civil ni posible reconciliación con la víctima porque, desgraciadamente, ha habido un asesinato".
Aunque consideró que "la sociedad no puede pensar que con cuatro años de internamiento se responda a unos hechos de esa gravedad", Gordillo se mostró partidario de estudiar las soluciones y posibles reformas a la Ley del Menor "desde la razón, no desde la emoción; siempre en el sentido del interés del menor, porque hay que intentar que no vuelvan a cometer delitos de esa naturaleza". Para el fiscal de la Audiencia Nacional "esta legislatura es el momento adecuado para la reforma de la ley, pero escuchando a todos, a los especialistas, técnicos, jueces, fiscales, letrados, y ver entre todos cuales son las posibles soluciones".
También se estudia que, ante casos de asesinato o violaciones, extraerlo de la Ley Menor e ir a una legislación más dura. Gordillo fue tajante a la hora de afirmar que "comprendemos que la Ley de Menores no cubra las expectativas actualmente, ahí tenemos casos como el de Orihuela o el de Sandra Palo, en el que no satisface ni a las víctimas ni a la sociedad y, desgraciadamente, es una ley que debe modificarse".
