Un hombre de 58 años ha fallecido este miércoles, tras dos semanas ingresado en estado crítico a causa de un infarto que sufrió mientras conducía por la calle Sor Valentina Mirón, en Plasencia. El suceso, ocurrido el pasado 17 de julio, provocó que perdiera el control del vehículo, que acabó colisionando con una farola frente al Destacamento de la Guardia Civil de Tráfico. Aunque el impacto fue leve, la situación del conductor era extremadamente grave desde el primer momento.
Los primeros en llegar fueron los servicios de emergencias del 112, que encontraron al hombre inconsciente y sin pulso. Durante casi media hora se realizaron maniobras de reanimación cardiopulmonar intensivas hasta que se logró recuperar su ritmo cardíaco.
Una vez estabilizado, el hombre fue trasladado al Hospital Virgen del Puerto de Plasencia. Ante la gravedad del cuadro coronario, fue derivado a la Unidad de Hemodinámica del Hospital Universitario de Cáceres, donde fue intervenido quirúrgicamente. Los equipos médicos lograron que sobreviviera a las primeras horas, pero las secuelas del paro cardiorrespiratorio prolongado eran severas.
El infarto no solo causó daños coronarios importantes, sino también lesiones neurológicas de consideración como consecuencia de la falta de oxígeno durante tanto tiempo. Desde entonces, el paciente permaneció ingresado en la unidad de cuidados intensivos en estado muy grave.
Dos semanas de lucha
A pesar de los esfuerzos médicos realizados durante catorce días, el hombre no logró superar las secuelas que dejó la parada cardiorrespiratoria. El tratamiento intensivo no logró revertir el deterioro neurológico y cardíaco sufrido, y su evolución fue desfavorable en todo momento.
La noticia de su fallecimiento se confirmó este miércoles: "A pesar del esfuerzo del equipo médico del 112, que logró reanimarlo tras media hora sin constantes vitales, y de la posterior intervención quirúrgica, no ha podido recuperarse de los daños coronarios y neurológicos provocados por el paro", han indicado fuentes sanitarias.