
La Guardia Civil investiga el crimen de David Valera, un vecino de Cabezo de Torres, pedanía de Murcia, cuyo cuerpo fue localizado el pasado domingo con un profundo corte en el cuello, oculto en el interior de un baúl en una vivienda del centro del pueblo. El inmueble, según fuentes de la investigación, era utilizado como fumadero de cocaína en base y había sido foco de quejas vecinales durante meses.
El único detenido por el momento es José Muelas, de 54 años, propietario del domicilio donde apareció el cadáver. Fue arrestado el mismo domingo y este martes ingresó en prisión provisional comunicada y sin fianza por orden del Juzgado de Instrucción número 6 de Murcia. Se le investiga por un presunto delito de homicidio o asesinato. No obstante, según ha podido saber La Verdad, los agentes del Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil trabajan con la hipótesis de que Muelas no actuó solo.
Dos sospechosos más
Testimonios recabados por los investigadores apuntan a la presencia de al menos otras dos personas en el domicilio en los días previos al hallazgo del cuerpo. Todos ellos, incluida la víctima, estaban relacionados con el consumo de estupefacientes. Un vecino del edificio, en declaraciones a La Verdad, explicó que David Valera "fumaba base y tenía problemas de adicción, pero no iba a ese fumadero. Vivía en Las Cumbres, con su familia. Creo que esta fue la primera vez que vino… y se lo cargaron". Según ese mismo testigo, en la vivienda se encontraban "El Muelas y otros dos hombres, todos del mundillo". También señaló la posibilidad de que el crimen se produjera a raíz de una discusión por una deuda: "No creo que Muelas lo matara. No lo veo capaz, pero a los otros…".
Oculto en un arcón
El fuerte olor que salía de la vivienda alertó a los vecinos durante el fin de semana. Agentes de la Guardia Civil se desplazaron al lugar el domingo y, tras acceder al inmueble, encontraron el cadáver en avanzado estado de descomposición y con claros signos de violencia. El cuerpo se hallaba dentro de un arcón en el salón, supuestamente con la intención de ocultarlo a la espera de deshacerse de él. La autopsia determinará el momento exacto de la muerte, aunque se estima que el detenido convivió con el cadáver al menos durante dos días.
Una recuperación truncada
David Valera, de 48 años, era conocido en el municipio como "El Lucero". Había estado en tratamiento por su adicción a las drogas en el programa Proyecto Hombre y, según su entorno, en los últimos tiempos había mostrado signos de recuperación. Recientemente había comenzado a trabajar como electricista. La última persona que habló con él fue su expareja, el viernes anterior al hallazgo. Al no tener noticias suyas al día siguiente, ella misma comenzó a buscarlo por el barrio, sin saber que su cuerpo ya se encontraba en el piso investigado.

