
La investigación de la Guardia Civil ha determinado que la pareja de la madre de Lucca, el niño de 4 años hallado sin vida en el interior de un búnker abandonado en una playa del término municipal de Garrucha (Almería), violó y golpeó al pequeño hasta la muerte el pasado 3 de diciembre. Por otra parte, no descarta que la mujer —Bárbara B. O., de 21 años— presenciase parte de los hechos.
El auto de ingreso en prisión dictado por la Sección Civil y de Instrucción número 4 del Tribunal de Instancia de Vera (Almería), señala que el varón —Juan David R. C.— "maltrataba y golpeaba" al menor —que vivía con la pareja en un piso compartido con otras familias— de forma habitual. En una ocasión incluso le fracturó un hueso del brazo. Solía aprovechar las ausencias de la madre para agredirle, aunque ella tendría "conocimiento" de lo que ocurría.
Así se deduciría tanto de las declaraciones de testigos en esta causa como de lo que la madre de Lucca había manifestado en sede policial y/o judicial en ocasiones anteriores. Cabe recordar que Juan David tenía en vigor una orden de alejamiento de la mujer y su hijo que desde el pasado 20 de octubre le prohibía acercarse a ellos, precisamente porque "en un proceso penal en el que fue parte" quedó acreditada "la existencia de un episodio de maltrato".
La familia materna del niño ha manifestado en los últimos días que Lucca faltaba continuamente al colegio y —cuando acudía— lo hacía "con hematomas" y hasta con "un brazo en cabestrillo". Circulan por internet videos de Juan David zarandeando al menor en plena calle, realizados por los vecinos. Días antes del crimen, una tía abuela del pequeño acudió al cuartel para pedir que se investigaran las lesiones que presentaba.
Los Servicios Sociales de la Diputación Provincial de Almería indican que actuaron "en tiempo y forma a instancias de la Fiscalía que solicitó el pasado 18 de noviembre un informe de la situación del menor como parte de las diligencias que estaban practicando". Se reunieron con la madre y "esta entrevista inicial se iba a completar con una visita al domicilio". Pero no llegaron a tiempo. Estaba prevista para el día después de que fuese asesinado.
El día de los hechos
Su padrastro le arrebató la vida el miércoles 3 de diciembre. De acuerdo con el mencionado auto, la madre del pequeño salió de casa sobre las 11:00 horas para ir a trabajar. Juan David y Lucca se quedaron solos en la vivienda, situación que el hombre aprovechó para violar al menor y golpearle "de forma reiterada" en el abdomen y otras partes del cuerpo, provocándole la muerte.
El informe preliminar de la autopsia recoge que el menor falleció como consecuencia de la agresión, que le produjo un desgarro hepático (laceración del hígado) y un politraumatismo abdominal con derrame intestinal, que derivó en un shock hipovolémico (pérdida severa de sangre o líquidos que impide el correcto bombeo al corazón y causa falta de oxígeno a los órganos, que pueden dejar de funcionar).
El papel de la madre
Bárbara podría haber presenciado parte de los hechos. Según la investigación de la Guardia Civil, ella volvió al domicilio alrededor de las 12:00 horas. Su compañero sentimental le habría trasladado que Lucca se encontraba "mal". Lo más llamativo es que el niño no muere hasta las 15:30 horas aproximadamente. Pero su madre no le auxilió.
El propio Juan David señaló ante el juez que su pareja llegó al domicilio en las "horas previas al fallecimiento" y que estuvo presente durante parte del episodio sin que "hubiera tenido intención presunta de evitarlo o asistir a su hijo", refleja el auto. Tanto es así que ella "se habría atribuido participación presunta en la causa de la muerte del menor" en los mensajes que envía después.
La Guardia Civil destaca por otra parte que la mujer acompañara a su pareja cuando éste portaba el cuerpo sin vida de su hijo, sin hacer nada. Ambos fueron juntos hasta el antiguo búnker ubicado muy cerca del límite del término municipal que da paso a Mojácar, donde horas más tarde fue hallado el maltrecho cadáver del pequeño Lucca.


