LD (Ángel Martín) El VIX es un índice de la volatilidad del mercado de valores, desarrollado por el mercado de opciones de Chicago, "Chicago Board Options Exchange" (CBOE). A pesar de sus imperfecciones y precauciones que hay que tomar al analizar el índice, es una medida ampliamente utilizada por los inversores y especuladores bursátiles para aproximarse a una medida de la incertidumbre existente a corto plazo en los mercados.
La revista americana Time se hace eco de las oscilaciones de este indicador, en un artículo de Ari J. Officer. En el estallido de la crisis subprime en Agosto de 2007 este indicador fue noticia por su escalada alcista. Según informaba el diario elEconomista en esos momentos, la crisis crediticia había disparado el “índice del miedo” hasta los niveles de la guerra de Irak. Sin embargo, esos niveles eran discretos si los comparamos con los máximos que llegó a alcanzar en el último trimestre de 2008.
Si lo miramos con más perspectiva, observamos también que la volatilidad vista en la presente crisis no tiene parangón con la que tuvo lugar en la anterior de 2001-2002, el pinchazo de la burbuja punto com. Los niveles del VIX son dos veces superiores a los vistos en esa fecha.
A pesar de que en la actualidad el índice (40) aun está por encima de la media de largo plazo (20), es innegable la brusca caída desde máximos a finales de 2008, alcanzando los niveles de 2002. “Eso son buenas noticias”, afirma Ari J. Officer, y luego de mostrar cautela al interpretar de manera demasiado optimista este descenso, concluye: “al menos, los inversores parecen creer de nuevo que a la noche le seguirá el día”, y que los buenos tiempos llegarán.
Además, como se advierte en el artículo, el VIX sólo da información sobre las expectativas y la incertidumbre de muy corto plazo, eliminándose así otro tipo de incertidumbre de la que no se habla apenas en los medios: la incertidumbre estructural, relativa con el actual sistema económico, con los actuales derechos de propiedad.
Incertidumbre estructural
Robert Higgs, economista e historiador económico especializado en temas como la Gran Depresión y el New Deal, llamó a este tipo de incertidumbre “regime uncertainty”. En un trabajo que tituló: Regime Uncertainty: Why the Great Depression Lasted So Long and Why Prosperity Resumed after the War (Incertidumbre de régimen: Por qué la Gran Depresión duró tanto y porqué la prosperidad llegó después de la guerra) sostiene la tesis de que la larga duración de más de diez años de la Depresión de los años 30 no se debió a un tímido impulso del gasto publico, como creen Krugman y otros keynesianos, sino a la pérdida de confianza de los inversores en el mantenimiento de la estructura de derechos de propiedad presente en aquel momento.
Y es que, las políticas asistemáticas y alocadas de Franklin Delano Roosevelt generaron una total desconfianza e incertidumbre en el sistema económico, desincentivando la puesta en marcha de proyectos y planes productivos por parte de inversores y capitalistas.
Sustituyan el nombre de Franklin Delano Roosevelt por el de Barack Obama, y puede que lo que Higgs relató en su trabajo se parezca a la realidad actual. El miedo e incertidumbre que más debería preocupar no es la que genera vaivenes bursátiles a corto plazo, sino la que puede hacer que la recuperación se obstaculice y retrase varios años como consecuencia de intervenciones públicas masivas e insensatas.