LD (EFE) En la última encuesta, realizada en verano, los economistas de institutos financieros e instituciones no financieras habían pronosticado un crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de los doce países que comparten el euro del 2,1 por ciento para el próximo año.
En el boletín de noviembre, publicado este jueves, el BCE indica que para el año 2006, los expertos encuestados también han corregido a la baja las expectativas hasta el 2,2 por ciento, frente al 2,3 por ciento pronosticado antes.
No obstante, el índice de crecimiento previsto para el conjunto de 2004 será del 1,9 por ciento, un 0,1 por ciento más que las cifras que se desprenden de la última encuesta a analistas y de otros indicadores disponibles.
Los participantes en la encuesta aseguran que el crecimiento del área será impulsado principalmente por la demanda externa, así que un posible enfriamiento de la economía internacional supondría un importante riesgo a la baja al caer las exportaciones.
Los expertos consultados por el banco europeo también han revisado notablemente al alza las expectativas para la tasa de desempleo en los países de la Unión Monetaria del 8,5 hasta el 8,8 por ciento, tanto en 2005 como en 2006.
No obstante, el índice de crecimiento previsto para el conjunto de 2004 será del 1,9 por ciento, un 0,1 por ciento más que las cifras que se desprenden de la última encuesta a analistas y de otros indicadores disponibles.
Los participantes en la encuesta aseguran que el crecimiento del área será impulsado principalmente por la demanda externa, así que un posible enfriamiento de la economía internacional supondría un importante riesgo a la baja al caer las exportaciones.
Los expertos consultados por el banco europeo también han revisado notablemente al alza las expectativas para la tasa de desempleo en los países de la Unión Monetaria del 8,5 hasta el 8,8 por ciento, tanto en 2005 como en 2006.