La compañía alcanzó una facturación de 30.431 millones de euros, un 17,5% más, mientras que el resultado bruto de explotación (Ebitda) se situó en 7.528 millones de euros, un 10,5% más, informa Europa Press.
Iberdrola mejoró el pasado año la cartera de negocios, con una inversión bruta de 5.674 millones y unas desinversiones de 2.000 millones de euros en activos no estratégicos (gas de Estados Unidos y Guatemala), reinvertidos en el negocio básico (renovables y línea Maine).
El grupo logró además una producción de 154.073 millones de kilovatios hora (kWh), un 8% superior a la registrada en 2009, de los cuales la mitad se generaron sin emisiones de CO2 a la atmósfera.