El Gobierno ha entrado en una guerra de cifras sobre la dimensión de la emergencia por la llegada a Canarias de más de 7.000 personas en patera en lo que va de año. Según Canarias7, las instalaciones de acogida soportan una ocupación del 140% y la Delegación del Gobierno ha empezado la evacuación a la Península.  Fernández de la Vega se ha apresurado a negarlo, pero organizaciones de la Seguridad del Estado, ONG, e incluso el presidente del TSJC han coincidido en señalar que la situación es límite. El Rey se ha interesado por este desafío sin precedentes, calificado por el PP como "la peor crisis humanitaria desde la Guerra Civil".

Al menos siete personas han muerto, ocho están heridas de caracter grave y diez de consideración, todas ellas de nacionalidad marroquí, como consecuencia del vuelco de un autobús de viajeros con matrícula belga que se salió de la calzada en el kilómetro 47,900 de la autovía A-1, a la altura de la localidad madrileña de Pedrezuela.

El incremento de los asaltos violentos a viviendas ha provocado un "significativo" aumento de la demanda de "habitaciones del pánico", una especie de cámara acorazada que los inquilinos habilitan en una estancia de la casa para protegerse de la cada vez más agresiva conducta de los delincuentes. La demanda está llegando principalmente desde Cataluña donde, según reconoce la consejera de Interior de la Generalidad, existe una "alarma extraordinaria" tras haberse registrado más de una veintena de robos violentos en viviendas unifamiliares los cinco primeros meses de este año.