L D (EFE) Cuatro jóvenes entraron, el pasado viernes, en una casa abandonada en una zona de "botellón" junto a la muralla segoviana. Dos de ellos, J.R.M., de 17 años, y J.A.M., de 15, según la versión de la Subdelegación del Gobierno, entraron en la dependencia donde se encontraban los indigentes, un hombre y una mujer, y lo quemaron con el mechero, extendiéndose inmediatamente las llamas con la ayuda de la gran cantidad de basura acumulada.
Fuentes jurídicas han indicado que, además del ingreso de dos de los menores en el centro especial, la Comisaría de Policía ha remitido a la Fiscalía la declaración tomada a los otros dos chavales, de 15 y 16 años, que acompañaban a los imputados, y han sido entregados inicialmente a sus padres. Los vagabundos que se refugiaban en el inmueble, R.P., de 44 años, nacido en Salamanca, y la mujer A.R., de 42 años, de Madrid, se recuperan de las graves quemaduras en unidades de quemados de sendos centros hospitalarios de la Comunidad de madrileña.
Los cuatro chavales fueron vistos por algunos testigos, que denunciaron el hecho en Comisaría, aunque inicialmente no fueron detenidos porque argumentaban que estaban intentando auxiliar a los heridos, ya que incluso fueron ellos mismos los que dieron aviso a los servicios de emergencias.
El subdelegado del Gobierno, Juan Luis Gordo , ha dicho este domingo en que "si bien no se trata de una actuación premeditada, aunque con consecuencias lamentables, proyecta problemas, como la falta de respeto a la dignidad humana". Gordo ha insistido en la necesidad de la educación en valores a los jóvenes, tanto por la familia como con la implicación de la comunidad educativa, y ha hablado de "fracaso de la sociedad". En este sentido, ha abogado por buscar alternativas al ocio, "que –a su juicio– vayan más allá del divertimento absurdo, como el de estos chavales que parece que no tenían otra cosa mejor que hacer".
Fuentes jurídicas han indicado que, además del ingreso de dos de los menores en el centro especial, la Comisaría de Policía ha remitido a la Fiscalía la declaración tomada a los otros dos chavales, de 15 y 16 años, que acompañaban a los imputados, y han sido entregados inicialmente a sus padres. Los vagabundos que se refugiaban en el inmueble, R.P., de 44 años, nacido en Salamanca, y la mujer A.R., de 42 años, de Madrid, se recuperan de las graves quemaduras en unidades de quemados de sendos centros hospitalarios de la Comunidad de madrileña.
Los cuatro chavales fueron vistos por algunos testigos, que denunciaron el hecho en Comisaría, aunque inicialmente no fueron detenidos porque argumentaban que estaban intentando auxiliar a los heridos, ya que incluso fueron ellos mismos los que dieron aviso a los servicios de emergencias.
El subdelegado del Gobierno, Juan Luis Gordo , ha dicho este domingo en que "si bien no se trata de una actuación premeditada, aunque con consecuencias lamentables, proyecta problemas, como la falta de respeto a la dignidad humana". Gordo ha insistido en la necesidad de la educación en valores a los jóvenes, tanto por la familia como con la implicación de la comunidad educativa, y ha hablado de "fracaso de la sociedad". En este sentido, ha abogado por buscar alternativas al ocio, "que –a su juicio– vayan más allá del divertimento absurdo, como el de estos chavales que parece que no tenían otra cosa mejor que hacer".