
Pese a seguir adelante con los papeles del divorcio, Mario Vargas Llosa ha querido felicitar a su todavía esposa, Patricia, con motivo de su 70 cumpleaños. La mujer del premio Nobel ya está en Lima tras su separación de Mario, y allí celebró una gran fiesta en la que el escritor fue uno de los pocos grandes ausentes.
Pese a ello, y tal y como informa ABC, citando como fuente una amiga íntima del matrimonio, Mario Vargas Llosa llamó desde Nueva York a su esposa para hablar con ella. "Mario sí llamó a Patricia para felicitarla. Entiendo que fue una conversación corta y cortés".
Con ella estuvieron los tres hijos de la expareja: Álvaro, Gonzalo y Morgana. La fiesta -que fue organizada por esta última- tuvo lugar a las afueras de la capital, en Lunahuná, y también estuvieron numerosos amigos y familiares. El último en llegar fue Álvaro, que se unió a la celebración -que duró dos días- en el último minuto.
Quien leyó un discurso fue, sin embargo, Gonzalo. Allí remarcó la fidelidad de su madre, su capacidad de "hacerse querer" y también su faceta de "amiga y madre perfecta". No se habló del divorcio, pero sí de una "nueva y compleja etapa" para ser feliz. Toda una demostración de cariño para Patricia, que acaba de dejar Madrid y la convivencia con su marido durante medio siglo.
