La crónica rosa de Es la mañana de Federico, con Isabel González, Beatriz Cortázar y Carlos Pérez Gimeno, giró en torno a muchos temas del ámbito del corazón, pero añadió una nota al particular romance de la diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada con el empresario Luis Miguel Rodríguez que vino de la mano de Federico Jiménez Losantos.
Y es que, de primera mano, el director de Es la mañana de Federico pudo contar que "Ágatha, muy guapa y absolutamente sola, no le va a dar la alegría a amigos y enemigos de romper con Luismi, como le dijeron que tenía que hacer al poco de liarse".
Un affaire sentimental que vino en el momento adecuado, tras la dolorosa ruptura de la diseñadora con el periodista Pedro J. Ramírez y todos los acontecimientos que vinieron después y que provocaron que Ágatha llegase a perder hasta "22 kilos".
"Me da a mí que ahí terminó", ha dicho Federico en esRadio semanas después de las imágenes de la primera gran reconciliación de Ágatha y Luismi a raíz de sus imágenes con una ex de Kiko Rivera, la brasileña Marcia di Lele.
"Lo que ha mantenido la pareja es el empeño de las amigas en que rompiera. Pero esta vez, porque en la cena había intimas amigas de Ágatha, esto ya es cuestión de tiempo".
El pronóstico es que ella "irá soltando amarras y el barco irá yéndose. Alegre no está, pero sí contenta porque tiene mucho trabajo. Pero esta historia, quieras que no, joroba. Fue una apuesta personal de ella contra su entorno". Un entorno que, al final, ha tenido razón: "Luismi es un excelente amigo, le gusta disfrutar y vivir la vida... pero no para enamorarte".