Joaquín Cortés y Mónica Moreno están viviendo los días más complicados de su vida ya que su segundo hijo en común, Andrea, se contagió de un virus que provoca bronquiolitis y que en bebés es más peligroso que la covid-19. Ingresado desde el 13 de junio en un hospital madrileño y con necesidad de oxígeno para poder respirar, el pequeño, nacido el pasado mes de febrero, se recupera favorablemente y podría abandonar la UCI próximamente, tal y como confirmó el bailaor ante las cámaras de Europa Press.
Completamente volcados en la recuperación de su bebé, Joaquín y Mónica se turnan para estar 24 horas al día con su pequeño que, a sus cuatro meses de edad, está dando a sus famosos papás una verdadera lección de supervivencia y fuerza.
En esta ocasión se vio al bailarín llegar a la madrileña Clínica San José y, visiblemente más tranquilo que hace unos días, señaló que Andrea se encuentra "bien, un poquito mejor". Fuera de peligro, afortunadamente, Joaquín desconoce cuándo podrán irse a casa con su bebé: "No lo sé, ojalá fuese hoy, pero va todo bien".
Sin embargo, y confesando que ha sido un "susto muy grande", el artista se ha disculpado porque aunque "está un poquito mejor" y "parece que sí" está fuera de peligro, admite que "no tengo muchas ganas de hablar".