
El pasado 26 de diciembre, Lola Flores Moreno, hija de Antonio David Flores y Olga Moreno, celebró su 10º cumpleaños por todo lo alto. Su padre y su actual pareja, Marta Riesco, le prepararon una fiesta de lo más divertida en un restaurante de Madrid al que también acudió Rocío Flores. Decenas de globos, regalos, decoración.... Riesco retransmitió a través de las redes sociales la celebración, siempre sin sacar la cara de la menor.
Sin embargo, los stories de Instagram de Marta no han hecho mucha gracia a la madre de la niña, que a través de la misma red social confesó sentirse molesta por la exposición de la vida de Lola. "Debido a la cantidad de mensajes que he recibido y sigo recibiendo voy a deciros algo. Para nada estoy acuerdo ni he consentido ni consentiré la exposición excesiva e innecesaria que se ha hecho de mi hija en las redes sociales en estas últimas 24 horas. Gracias por estar siempre", dijo a sus seguidores incondicionales.
Unas incendiarias declaraciones que no hacen más que dejar claro el distanciamiento entre una familia que en su día parecía inquebrantable. A pesar de todo, Olga también felicitó a su hija públicamente con una foto de la niña soplando las velas. "Un día como este nació la persona que más amo en el mundo, mi Lola. La que me hace reír, sentir, amar y sobre todo vivir… Te amo", escribió la sevillana.
Es la primera vez que Olga ha hablado tan claramente de su malestar con la novia de su exmarido. A pesar de que siempre se ha mostrado muy conciliadora y ha defendido una relación amistosa con Antonio David Flores, las cosas parece que no van del todo bien.


