
Sofía Mazagatos es una guapa madrileña que resultó elegida Miss España 1991. Wikipedia cita por error que lo fue de 1992. Correspondía ese reinado de belleza al año anterior, porque debía haberse celebrado en el mes de octubre; al retrasarse, tuvo lugar el sábado 25 de enero de ese 1992. Doy fe porque cubrí ese evento informativo en La Coruña. Resuelto el aparente embrollo, digamos que fue entonces cuando entrevisté a la ganadora, con quien en adelante tendría más encuentros periodísticos.
Una joven que aprovechó su título para convertirse en una cotizada modelo, presentadora de televisión, fugaz actriz y, en consecuencia, personaje habitual de las revistas rosas. Incrementó esa presencia con sus diversos amores. Hoy, tras una larga travesía sentimental confiesa haber equilibrado su vida, es madre de una hija y espera otro bebé para diciembre, ya cuando haya cumplido el mes de octubre cuarenta y nueve años. No teme, por alcanzar esa edad, ningún riesgo para su embarazo.
Sofía Mazagatos Gómez contaba diecisiete años cuando ganó el título de Miss España. Estudiaba tercero de BUP que compaginaba con unos cursos de marketing y relaciones públicas. No era la favorita del certamen. Pero el jurado que presidía Luis María Anson terminó declarándola vencedora, ante la decepción de Miss Tenerife, que era supuestamente la que tenía que haber lucido la banda acreditativa del concurso. Lo retrasmitió para toda España Telecinco.

Sofía tuvo además la fortuna de participar en Miss Europa, donde quedó en buena posición. En realidad su título de Miss España le servía para haber tomado parte en el de Miss Universo, mas una de las cláusulas era que las participantes debían tener la mayoría de edad y nuestra compatriota sólo contaba diecisiete años, como decíamos.
La vida profesional de Sofía Mazagatos fue intensa. De cotizada modelo pasó a gestionar una agencia junto a Mar Flores, pero el negocio fue una decepción para ambas y cada cuál siguió su camino. Sofía optó por prepararse para ser actriz y confesaba haberse ido a Nueva York una temporada y recibir lecciones de una escuela sucursal del Actor´s Studio de Los Ángeles, de Lee Strasberg. Dando por hecho esa estancia, le sirvió para intervenir en varias series de televisión, entre ellas Paraíso y Arrayán, esta última emitida a través de Canal Sur. Por supuesto, lo suyo era más vistoso cuando desfilaba en las pasarelas de Cibeles y Gaudí.
Y pisó un escenario teatral por primera y última vez contratada por Arturo Fernández para su vodevil "Esmoquin". Sus ganancias fueron más sustanciosas al rodar spots publicitarios para anunciar marcas de pantalones vaqueros, cava, muebles, coches, cosméticos… Asimismo se arriesgó a montar otra empresa dedicada a la comunicación, que le fue mejor que la agencia de modelos.
Respecto a su vida sentimental, fue asimismo movida. Además de sus salidas (y entradas) con el matador de toros José María Manzanares (padre) y Alessandro Lequio, que cambiaba de novia al dos por tres, Sofía Mazagatos mantuvo otras relaciones más duraderas, aunque ninguna acabara en boda. Una de ellas con el arquitecto, empresario taurino y presidente del Sevilla F.C. José María González de Caldas, veintidós años mayor que ella. Entre crisis y vaivenes acabaron por decirse adiós no sin protagonizar un pequeño escándalo en torno al automóvil de alta gama, que aquel empresario le reclamaba y ella creyó ser un regalo.
Después de aquella desilusión, Sofía creyó haber encontrado el hombre de su vida, supuestamente millonario, de origen iraní, Max Batiyi, con quien mantuvo amores entre 2002 y 2005, hasta que descubrió que el susodicho tenía un turbio pasado.
Finalmente Sofía Mazagatos dio con otro empresario, José (Tito) Pajares San Román, socio de varias discotecas y salas de ocio nocturno madrileñas, entre ellas Gabana 1800 y Le Boutique. Este caballero, reacio a aparecer en las revistas del corazón, estaba separado de Begoña García Vaquero, con quien celebró matrimonio de escasos meses de duración. Ella, actual esposa del propietario de Joy Eslava, Pedro Trapote, y hermana de la compañera de Felipe González.
De la intermitente convivencia con Tito Parajes, Sofía tuvo una niña en noviembre de 2015, llamada como ella. La primera Miss España siendo madre soltera. Esperaba otro bebé en 2018, que perdió en el octavo mes de embarazo, ocasionándole un doloroso trauma. Y ha sido recientemente cuando, gozosa, anunciaba que será madre de nuevo antes de las próximas Navidades.
Hace ya bastante tiempo que Sofía Mazagatos no asiste a acontecimientos sociales y prefiere quedarse en casa, alejada de todo bullicio. Hacía años que no aparecía en las revistas del corazón. Vive así contenta, tranquila, como madre y ama de casa.
No podemos poner fin a este artículo sin recordar que Sofía Mazagatos fue quien en su día proporcionó para los periodistas una frase que ya es histórica cuando alguien dice encontrarse en un momento álgido de su vida: "Estoy en el candelabro". Si recurrimos al sentido común en vez de al diccionario de la RAE, ¿qué más nos da hallarnos en candelero o encima de una lámpara luminosa? Feliz creación lingüística, que tantos han repetido.


