El actor Fernando Tejero visitó este martes el plató de El Hormiguero para promocionar su último proyecto, la película hispano-uruguaya, Historias, escrita y dirigida por Paco Sepúlveda y donde comparte escenas con Lola Dueñas, Juan Diego o Emilio Gutiérrez-Caba. La película llega a las salas este viernes y cuenta, a través de once relatos, historias de superación e integración social "independientemente de su origen o circunstancias", explicó el intérprete a Pablo Motos.
"Estoy muy feliz, más que una perdiz", señaló Tejero sobre sus nuevos proyectos y los que están por llegar, pues actualmente se encuentra trabajando con el cineasta Alejandro Amenábar a quien describió como "humilde, sabio y respetuoso". Sin embargo ahora está centrado en su nueva película que calificó de "muy emotiva", pues aborda "distintas etapas de la vida humana": "El director ha sido valiente de contar esas cosas que a los seres humanos nos cuesta verbalizar".
Al hablar sobre los miedos, el actor debatió con el presentador sobre aquello que más "les aterroriza": "Acepto el dolor como parte de la vida y disfruto de la soledad", señaló, antes de desvelar "su mayor miedo": "A mí me llega una carta de Hacienda a casa y me tiemblan las piernas hasta que voy a recogerla a Correos. Lo que yo sufrí no fue una inspección fue un registro hasta de los calzoncillos", confesó, recordando una inspección "muy exhaustiva" que sufrió hace unos años. "Me cago en todos los ministros de Hacienda que ha habido y en todas las sucursales", bromeó.
Pablo Motos también abordó con Tejero la tensa situación política del país a través de una "curiosidad familiar" del invitado: los hermanos del actor pertenecen a partidos opuestos, uno a Podemos y otro a Vox. Según Fernando Tejero, las discusiones políticas durante las cenas familiares se volvieron tan intensas que se decidió prohibir el tema: "Yo tengo muy clara mi ideología, pero discutir y echarse mierda me parece una falta de respeto tan grande que yo no quiero entrar ahí".
No obstante calificó de "patético" el panorama político actual y lo comparó con "un programa del corazón donde todos se atacan sin escrúpulos".