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Malena Alterio esconde su vida íntima

La actriz Malena Alterio procede de una familia ligada al mundo de la interpretación con su padre, el gran Héctor Alterio al frente.

La actriz Malena Alterio procede de una familia ligada al mundo de la interpretación con su padre, el gran Héctor Alterio al frente.
LD

Lleva Malena Alterio, a sus cincuenta años cumplidos a comienzos de este 2024, una vida artística en alza, hasta ser considerada en la actualidad una de las actrices más competentes. Procede de una familia ligada al mundo de la interpretación. Cuyo padre, el gran Héctor Alterio, estuvo amenazado de muerte y decidió afincarse en España junto a su esposa y sus dos hijos, Ernesto y Malena, que han seguido las huellas profesionales de su progenitor. Malena consiguió el premio Goya este año "a la mejor actriz" por su papel en "Que nadie duerme". Se divorció tras quince años de unión con Luis Bermejo, actor y director. Y desde 2017 ha llevado una vida sentimental tan discreta que nadie sabe ni con quién sale ni con quién entra. Como es natural, respetamos su derecho a preservar su intimidad.

Malena apenas contaba dos años, nacida en Buenos Aires, cuando en brazos de su madre, la psicoanalista Ángela Bacaicoa, y junto a su hermano Ernesto, cuatro años mayor que ella, llegaron a Madrid. Se habían exiliado de Argentina por una contundente razón: al cabeza de familia lo había amenazado de muerte la Triple A, organización política argentina de extrema derecha.

Héctor Alterio se encontraba en San Sebastián en septiembre de 1975 para asistir al estreno de su película "La tregua", en competición en dicho certamen cinematográfico. Una historia melodramática con un final que provocaba la emoción y hasta las lágrimas a muchos espectadores. Héctor era el enamorado protagonista de la historia. No se le conocía en España y entonces causó admiración. Estuve acreditado en ese festival. Antes de que finalizase, Alterio recibió noticias desde la capital argentina. La mentada triple A lo había amenazado con asesinarlo. La reacción entonces del aludido fue quedarse en nuestro país. Se instaló, como decíamos, con su esposa e hijos en Madrid. No tenía entonces medios económicos suficientes para subsistir. Pero consiguió que productores como Elías Querejeta le prestaran ayuda, oportunidades para rodar algunas películas. Fue la introducción del clan Alterio entre nosotros, pues con el tiempo, tanto Héctor como sus hijos se han vinculado al cine español, al teatro y la televisión, derrochando talento, entusiasmo, al punto de que el patriarca, que cumplirá noventa y cinco años el próximo 21 de septiembre, sigue en activo subiéndose al escenario, exhibiendo su incontestable magisterio actoral.

Si su primogénito Ernesto lleva también una envidiable carrera, Malena ya decíamos es una actriz completa, capaz de variados registros dramáticos. De su madre, ambos hermanos recibieron un consejo: si fracasaban en la profesión que habían elegido, la de actores, debían asegurarse su futuro. ¿Cómo? Adquiriendo una licencia de taxista. Nada de eso les ha sido necesario.

Malena Alterio se hizo popular en dos series de televisión: "Aquí no hay quien viva", con el personaje de Belén López Vázquez, y "La que se avecina", defendiendo el papel de Cristina. Varias temporadas de emisiones que le depararon luego la oportunidad de saltar a la gran pantalla y a la escena.

A Luis Bermejo, queda dicho que actor y director, lo conoció a principios del nuevo siglo, casándose en 2003. Convivencia rota ya en 2016 para legalizar su separación un año más tarde. Fue una pareja estable y cuándo surgió su ruptura continuaron siendo amigos, al punto que volvieron a trabajar juntos en la obra "Los que hablan".

Les contamos algunos detalles sobre Malena, que es una gran cocinera entre otras de sus habilidades. Físicamente, además del talento interpretativo, heredó como también su hermano un apéndice nasal como el de su padre. Pero ninguno de los dos quiso acceder a una rinoplastia. Complejos, ninguno. Hacia Héctor Alterio sus dos hijos sienten respeto, cariño y veneración. Una de las satisfacciones de ambos hermanos fue entregarle el Goya de Honor que recibió en 2004.

"Mi padre es un sabio – dice Malena – que me ha enseñado junto a mi señora madre a honrar la vida".

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