
Visiblemente emocionado y además, en un día muy especial -el de la Comunidad Valenciana- ante una abarrotada plaza de toros que vibró con su última faena, Enrique Ponce contó con el apoyo incondicional de sus seres queridos, como su pareja, Ana Soria, que estuvo acompañada por su madre, Rosario y por varias amigas. A pesar de intentar pasar inadvertida en el tendido, Soria compartió confidencias con sus amigas mientras hacía fotografías para el recuerdo de cada pase de muleta de Ponce, sin perder oportunidad de agitar su pañuelo para pedir una oreja.
Como no podía ser de otra manera, además de los padres del diestro, Emilio y Enriqueta, también estuvieron muchos amigos entre los que se encontraban la infanta Elena acompañada de su íntima amiga Rita Allendesalazar, Ramón García, Miguel Báez 'El Litri' acompañado de su mujer Casilda Ybarra, Javier Conde, Pepín Liria o Vicente Ruiz 'El Soro'.

Apostando por la comodidad, Ana lució un look casual con top negro con escote halter, pantalón blanco y blazer del mismo color. Escapando de todo protagonismo, Ana evitaba estar al lado de Ponce cuando el torero,muy emocionado, abandonaba la plaza de Valencia a hombros, recibiendo el cariño de todos los aficionados.
Mientras el torero se sacaba fotos con los aficionados a la salida de su hotel, Ana se ha mostrado más esquiva optando por meterse en la parte de atrás del vehículo del diestro y taparse la cara con la chaqueta, sorprendiendo con su extraña actitud en un día en el que, después de 4 años de sólida relación, muchos esperaban que posase con su pareja tratándose de su adiós a los ruedos.
"Ha sido muy bonito" reconocía Enrique, confirmando con una gran sonrisa que ahora toca disfrutar de su nueva vida al lado de la almeriense.
