
En 2022 el actor Luis Lorenzo y su mujer Arancha Palomino fueron detenidos por la muerte de María Isabel Suárez, tía política de éste. Las primeras investigaciones apuntaron a que la causa del fallecimiento podía estar relacionada con un envenenamiento, pero las conclusiones del último informe encargado por el juez que investiga el caso recogieron que "no existen datos objetivos de intoxicación aguda por cadmio o manganeso", como sostenía la autopsia.
El intérprete de series como La que se avecina estuvo a punto de entrar en prisión y su vida ha cambiado de forma radical. Según desveló el programa TardeAR, Lorenzo ha trabajado como conductor de VTC y fue visto realizando su servicio en las inmediaciones de la estación de Atocha de Madrid.
En una conversación telefónica, el actor explicó al programa de Telecinco su cambio de profesión. "Es una cosa que he hecho de forma temporal y no voy a continuar. De hecho, ya no sigo. Lo hice temporalmente por una sustitución pero ya no continúo", confesó. En este sentido, reconoció que está "luchando" por salir adelante en medio de la situación judicial que atraviesa.
"Lo que he hecho es buscarme la vida porque el juzgado sigue teniendo retenida una cantidad muy importante de mi dinero y hasta que no se solucione tengo que seguir adelante. Simplemente lo he hecho por sobrevivir", añadió.
Estudios insuficientes
Los doctores explican que, como expuso un informe del hospital Gómez Ulla de Madrid, la redistribución de los metales pesados se puedo producir tras la muerte de María Isabel. En cualquier caso, destacan que los estudios realizados tras la muerte "fueron escasos" (de sólo dos órganos) y que "debido a" ello no les fue posible determinar "la causa exacta del fallecimiento".
En consecuencia, el informe podría ayudar a los acusados a que se archive la causa contra ellos por homicidio. Aunque quedaría por ver qué ocurre con el resto de delitos que se les imputan. La investigación de la Guardia Civil mantiene que se habrían producido malos tratos hacia la anciana y que le habrían podido administrar fármacos psicóticos con el objetivo de mermar sus capacidades cognitivas y expoliar su patrimonio.