Se va a cumplir medio año de la abrupta salida como vocalista de La Oreja de Van Gogh de Leire Martínez. Y está hasta el gorro de que se le pregunte por las razones que la llevaron a dejar el grupo. ¿O es que en realidad la echaron con cajas destempladas y no quiere contar los detalles? De todo puede haber en la viña del Señor, se decía antes en casos así.
Leire no se ha amilanado ante esa situación al quedarse fuera de la banda donostiarra y se ha pasado las últimas semanas ocupada en el lanzamiento de su primer disco como solista. Contará historias en las letras que tienen mucho que ver con sus propias vivencias. "Hablaré de mí en esas próximas canciones", ha dicho, sin especificar de qué. Y para distanciarse de su etapa anterior, ha cambiado de look que así se entiende cuando alguien trastoca su físico. Luce ahora Leire unos cabellos pelirrojos, que sustituyen en el color a los castaños de siempre. Las mujeres, sean artistas del espectáculo o no, suelen siempre renovarse empezando por los peinados, mientras que los varones somos más tradicionales.
Al presentarse no hace mucho en una entrega de premios de la cadena Dial, muchos creyeron que Leire Martínez usaba peluca. Y no era así. En ese evento ejerció de presentadora con mucha altura y hasta se atrevió a interpretar una versión de "Mi gran noche", la creación de Raphael que mucho antes había estrenado su autor, el belga Adamo. Una manera asimismo de dar a entender que puede cantar lo que le apetezca, en el género pop melódico.
De ese pasado cercano con La Oreja de Van Gogh, es sabido que sustituyó a Amaia Montero, quien fue la primera vocalista del conjunto. La larga etapa de Leire desde entonces fue fructífera, mas últimamente hubo fricciones con algunos miembros del grupo. Y quien más tenía que perder era ella, no los fundadores de esa formación musical. Parece ser que la causa principal se originó cuando a Leire le llegó el rumor de que Amaia Montero iba a volver circunstancialmente, aunque solo, si seguimos ese chisme, para una colaboración especial. Lo que, supuestamente, fastidió a Leire, amén de que ya discutía mucho con sus compañeros. Y se marchó. De malas maneras, algo que molestó muchísimo a la cantante después de tantos años con La Oreja de Van Gogh. Una admiradora suya dejó en el aire esta afirmación: "Leire no se ha marchado por propia voluntad; la han echado".
En las escasas declaraciones de Leire después de su ruptura, ha dejado bien claro que aunque no quiere referirse para nada a Amaia Montero, ésta no tuvo nada que ver con su salida; que la respeta, le tiene incluso admiración, aunque su amistad nunca fue cercana. "No es mi guerra con ella", subrayó Leire.
Los de La Oreja de Van Gogh tampoco han entrado a trapo en ese lío, aunque recordamos que se vieron más afectados cuando Amaia dejó de ser su vocalista. A Leire, se dice, no la valoraban demasiado.
A partir del próximo mes de junio, Leire Martínez ya tiene prevista una serie de actuaciones como solista, apoyándose en ese disco que estará pronto en la calle.