
Irene Rosales y Kiko Rivera vuelven a las revistas este miércoles, donde encontramos formas muy diferentes de hablar de su separación. Mientras que ¡Hola! asegura que nunca hablarán mal el uno del otro y descarta problemas económicos como el detonante de la separación, Lecturas aporta datos íntimos de la ya expareja que hacen sospechar que, si no los ha contado uno de los dos, ha sido alguien muy cercano a la familia.
Por ejemplo: que Kiko obligó a Irene a dormir con su hija pequeña cuando nació para no molestarle o que un hermano le regaló a Isabel Pantoja una caja de cava pero que la marca no le pareció a Paquirrín lo suficientemente digna. Las infidelidades tampoco ayudaron: ella le perdonó una infidelidad durante su segundo embarazo. Sin embargo, la revista asegura que Irene recibe "constantes mensajes de chicas a través de las redes sociales que le cuentan los escarceos de su marido".
Según aseguró Isabel González en la Crónica Rosa de Es la mañana de Federico, "podemos confiar en que se lleven bien, de momento". Sin embargo, según se van conociendo más detalles y conociendo al personaje, Federico Jiménez Losantos lo puso en duda: "Ningún Pantoja acaba llevándose bien con nadie". ¿Veremos a alguno hablando de su divorcio en el programa De viernes en Telecinco? Ya adelantó Paloma Barrientos que Kiko Rivera en negociaciones.
La clave está en la diferencia de declaraciones que el entorno de la ya expareja hace a las revistas ¡Hola! y Lecturas, tal y como apuntó Daniel Carande. "Hola y Lecturas. ¿No te da a ti que están jugando a ver quien se la lleva antes? Es de primero de periodismo de corazón (...) No vale lo mismo [para una exclusiva] decir que nos llevamos maravillosamente... Todo vende según el titular".
Irene Rosales, tocada
Este mismo miércoles, tras salir a la luz las revistas, Irene se vio sobrepasada y abandonó su domicilio en Sevilla muy tocada cuando se le acercó la prensa. "¡Es muy injusto que se haya hecho como si yo estuviese dando una exclusiva cuando es totalmente mentira! ¡Es muy injusto! Estoy muy enfadada porque es muy injusto, porque no he dicho ni una sola palabra. Atiendo a los medios siempre de la mejor manera posible y con la mayor educación, para que me saquen una portada como si yo hubiese hecho una exclusiva", explicó enjugándose las lagrimas con un pañuelo.

Sin embargo, no quiso revelar si va a romper su silencio y va a hablar sobre su separación, ni si ha hablado con Kiko sobre estas declaraciones que ahora han visto la luz.

