El árbol y el Belén dan la bienvenida a la Navidad en los hogares españoles. Esta bonita tradición es un buen día para compartir con la familia con música navideña. Aunque los más ‘Grinch’ detesten estas fechas, estas costumbres llevan cientos de años celebrándose, pues según la leyenda se remonta al siglo VIII.
En un principio, se adornaba con velas que representaban la luz de Jesucristo y con manzanas que simbolizaban el pecado y las tentaciones. Ahora, el decorado se ha transformado y utilizamos objetos tanto naturales como reutilizables año tras año, aunque los más exquisitos optan por cambiarlo cada festividad. Con el paso del tiempo las velas se cambiaron por luces y las manzanas por las tradicionales bolas, guirnaldas u otros adornos navideños.
¿Cuál es el significado los adornos del árbol?
El Árbol de Navidad simboliza la vida, el universo y el amor de Dios, los cristianos practican esta tradición para celebrar el nacimiento del niño Jesús.
Asimismo, cada adorno tiene su significado. Las bolas de colores, por las que suele haber disputa entre los familiares para colocar en un orden "correcto", simbolizan los dones de Dios hacia los hombres. La estrella que guía comúnmente a Sus Majestades Los Reyes Magos de Oriente, tradicionalmente guía a los creyentes en la fe. Las guirnaldas que rodean el abeto representan la unión familiar, y por último, el color del árbol la vida.
Es costumbre ponerlo el día de la Inmaculada Concepción, el 8 de diciembre, el día en que fue concebida la Virgen María.
¿Cómo decorar el árbol de Navidad?
La variedad de adornos y árboles se ha ampliado, y el echo de comprar una decoración navideña puede resultar abrumador, con diferentes tamaños, colores, materiales...
Elegir un lugar acogedor es uno de los primeros pasos para crear un hogar navideño agradable donde reunir a la familia en las festividades, teniendo en cuenta el tamaño y altura de nuestro arbusto para construir un rincón proporcionado alejado del calor directo para no dañar las ramas. Asimismo, es importante abrir bien cada una de ellas en todas las direcciones, para tener un árbol frondoso.
El color de la Navidad es el rojo y el dorado, pero en la actualidad, son muchos los que optan por la originalidad y la excentricidad de colores para aportar personalidad.
Las luces también pueden seguir la temática de un único color o varios y se colocan rodeando el árbol de abajo a arriba e introduciéndolas en el interior para que se encuentren repartidas por la frondosidad y aportar mayor iluminación.
Y la parte más divertida será colgar los adornos junto a los pequeños, siempre, como hemos dicho, de forma homogénea para evitar disputas, aunque siempre habrá diferentes opiniones de los miembros de la casa. Sobre un color aportar las temáticas más navideñas con los adornos de cristal, madera, tela... o las creatividades de los más pequeños de la casa o de los más atrevidos. Así, colocar ángeles, piñas, campanas, lazos, guirnaldas, bolas, estrellas... Recuerda colgar los más pesados en el interior y los más ligeros sobre las ramas. No olvides cubrir las patas con una capa, una cesta de mimbre o introducir el abeto en una maceta.
Y llega el momento más especial, colocar la estrella en el punto más alto y así tendrás tu árbol de Navidad.