Muy cerca de Madrid capital se encuentra el histórico municipio del Real Sitio y Villa de Aranjuez, un lugar emblemático en la geografía de la Comunidad de Madrid y de toda España, que fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en 2001. Este destino ofrece una combinación perfecta entre la riqueza patrimonial, su rico entorno rural y una propuesta gastronómica única, además de tener el palacio real con los mayores jardines del sur de Europa. En esta localidad el visitante puede disfrutar desde un relajante paseo por sus jardines hasta una experiencia de enorturismo entre sus famosos viñedos.
La gastronomía es uno de los principales atractivos de Aranjuez con una amplia oferta culinaria que rinde homenaje a los productos frescos de su fértil huerta y a la tradición de las recetas de toda la vida. En el municipio, el visitante encontrará restaurantes reconocidos que destacan por su calidad y respeto a los sabores locales, con un toque de modernidad.
Con una tierra regada por el río Tajo, Aranjuez cuenta con un suministro constante de frutas y verduras de alta calidad, como fresas, espárragos y alcachofas, que llegan directamente del campo a las cocinas. El uso de estos ingredientes frescos y locales no solo añade un toque de autenticidad a cada plato, sino que también refleja el compromiso de la ciudad con sus recursos naturales y los productos de cercanía.
Como muestra de esta rica gastronomía encontramos en las calles de Aranjuez establecimientos como Casa Pablo, un restaurante bicentenario, de tradición familiar, con barra de tapas y una bonita terraza. Otro de estos restaurantes es Casa José, otro de los grandes referentes gastronómicos de la localidad, que presume de "una cocina improvisada dentro de una reflexión provocada por la experiencia, los recuerdos y la visión hacia el futuro de una forma de alimentarse natural", una idea culinaria nutrida siempre por los productos de la tierra. Otros referentes de la gastronomía de Aranjuez como son Aguatinta, Carême, Casa Delapio, A Terra Delapio, donde se pueden degustar los productos de la huerta con fama en toda España, con un toque creativo.
Aranjuez también es un destino ideal para los amantes del vino. Cada vez son más las experiencias enoturísticas que ofrece este municipio con las que aprender del proceso de elaboración del vino muy de cerca y de la historia de las bodegas locales.
Bodegas de renombre como la de Real Cortijo, que es además monumento histórico artístico, fue construida en 1782 por el rey Carlos III. Al llegar el turista puede asombrarse con una monumental portada de piedra rodeada de viñas y al franquearla recorrerá su interior para descubrir donde duermen los vinos. En su lagar convertido en dos elegantes salones los visitantes tienen posibilidad conocer el método de elaboración de sus vinos, explicado por un experto enólogo, además de realizar catas guiadas en un entorno único.
Otro ejemplo de enoturismo de calidad en Aranjuez es la Bodega El Regajal, situada en la Reserva Natural de El Regajal-Mar de Ontígola, con vistas panorámicas a la villa de Aranjuez. Se trata de una finca que ofrece visitas guiadas organizadas que incluyen paseos por los viñedos, charlas sobre el proceso de elaboración y catas de sus caldos. Una experiencia ideal para conocer más de cerca la conexión entre Aranjuez y el vino.
Paseos por las Huertas de Aranjuez
Otro de los encantos de Aranjuez son sus huertas, conocidas por producir algunas de las legumbres y frutas como la fresa o el espárrago. Muchos restaurantes de la zona obtienen de aquí lo indispensable para sus ricas recetas que luego llevan a sus platos. Los visitantes que lo soliciten tienen la oportunidad visitar las huertas y descubrir los cultivos de temporada. Una divertida actividad que permite también a los más pequeños conocer de cerca el valor agrícola de Aranjuez y aprender con ello.
Qué ver y qué hacer en Aranjuez
Aranjuez cuenta con un conjunto de monumentos y edificios históricos que evocan su pasado como residencia de la realeza española y entre sus calles encontraremos verdaderas joyas monumentales como el Palacio Real con los mayores jardines del sur de Europa, además de que en su interior es casi obligatorio parar en el Salón de Porcelana o el Salón del Trono, que conservan una decoración fastuosa y prueba del esplendor de otra época.
El Museo de Falúas Reales, que también se encuentra en el recinto del Palacio Real, alberga las embarcaciones de recreo que usaban los monarcas para navegar por el río Tajo. Esta colección se halla expuesta en un edificio construido en el Jardín del Príncipe en las cercanías del Embarcadero Real y sus pabellones.
Sus jardines y fuentes
Los jardines del Palacio Real son un atractivo muy especial a la hora de planear una visita. Estos espacios verdes fueron ordenados en su día para deleite de los reyes que regentaban el palacio y sus múltiples invitados a fiestas y eventos de todo tipo. Entre los jardines más destacados por su belleza se encuentran el Jardín del Príncipe, donde ver el Estanque de los Chinescos. También hay que pasearse por el Jardín de la Isla, rodeado por el río Tajo, que ofrece un paseo tranquilo entre esculturas renacentistas. El Jardín del Parterre, cerca del Palacio, muy del estilo francés de la época. Y no hay que olvidar el Jardín de Isabel II, es el más pequeño de todo el conjunto ajardinado de Aranjuez.
Las fuentes de Aranjuez son otro de los elementos que embellecen sus jardines. La Fuente de Hércules y Anteo, la Fuente de Ceres, ubicadas en el Jardín del Parterre y la Fuente de Hércules e Hidra, la Fuente del Reloj y la Fuente del Niño de la Espina, estas tres últimas ubicadas en el Jardín de la Isla, son algunas de las más destacadas, muchas de ellas con esculturas y detalles que reflejan la mitología y el arte clásico.
Otros rincones de visita recomendable por la localidad son la Real Casa del Labrador y la Real Capilla de San Antonio, esta última situada en la plaza del mismo nombre. Además, el Teatro Real Carlos III, el Palacio de Godoy, el Convento de San Pascual, el mercado de abastos, completan la larga lista de atractivos turísticos de Aranjuez. Para los más taurinos su plaza de toros, una de las más antiguas de España y su Museo Taurino.
Hay que destacar la cercanía de Aranjuez con Madrid ya que esta localidad del sur de la Comunidad se encuentra a tan solo 40 minutos del centro de la capital. Si el visitante prefiere no utilizar el coche, el Tren de la Fresa es una buena elección para llegar al municipio. Los fines de semana de primavera y otoño este ferrocarril rememora el recorrido del primer ferrocarril de la Comunidad de Madrid, construido en el año 1851 por indicación de Isabel II para unir la capital con el Palacio Real de Aranjuez.
La visita no se limita solo a la parte histórica y gastronómica puesto que la localidad ofrece diversas actividades lúdicas para disfrutar en familia o con amigos. Entre las alternativas es posible optar por un paseo en globo para contemplar el municipio desde las alturas, o bien un paseo en barco por el río Tajo. Los más pequeños pueden disfrutar del Chiquitren, un tren turístico que recorre las principales atracciones del municipio.