
Desde hace unos años hay una plaga de garrapatas que frecuenta Cataluña, pero en diciembre de 2024 se ha podido observar que hay una especie invasora que no hace más que expandirse por toda la comunidad, localizándose en 81 municipios repartidos entre las provincias de Barcelona (55) y Tarragona (26). la garrapata en concreto es la Hyalomma lusitanicum, desconocida hasta hace pocos años en el territorio, su crecimiento podría a amenazar con ser un tema de salud pública.
Recordemos que las garrapatas son parásitos que se alimentan de la sangre de su víctima y, aunque su picadura no provoca dolor agudo, sino que es preocupante porque puede ser transmisora de graves enfermedades como la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, la enfermedad de Lyme, la encefalitis de la garrapata o fiebre recurrente, entre otras afectaciones.
La provincia de Barcelona la más afectada
Recordemos que no es el primer año que hay plaga de este tipo de parásitos en Cataluña, pero si es la más extensa hasta el momento. De hecho, mientras que en 2022, la presencia de H. lusitanicum se limitaba a 31 municipios, principalmente en la provincia de Barcelona, en diciembre de 2024, la garrapata ya se había detectado en 81 municipios: 55 en la provincia de Barcelona (28 de ellos en su área metropolitana) y 26 en Tarragona.
¿Cuáles son los municipios del Área Metropolitana de Barcelona afectados por las garrapatas? Badalona, Barcelona, Badia del Vallès, Barberà del Vallès, Begues, Esparreguera, Gavà, Lliçà d’Amunt, Martorell, Mataró, Montmeló, Montornès del Vallès, Palau-Solità i Plegamans, El Papiol, Polinyà del Vallès, Premià de Dalt, Ripollet, La Roca del Vallès, Rubí, Sabadell, Sant Adrià del Besòs, Sant Boi de Llobregat, Sant Feliu de Llobregat, Sant Quirze del Vallès, Santa Coloma de Gramenet, Santa Perpètua de la Mogoda, Santa Coloma de Cervelló y Viladecans.
¿Por qué se expande la garrapata?
Este tipo de plagas suceden por varios motivos, uno es porque las condiciones climáticas son favorables, con un calor que favorece su expansión. Por otro lado la abundancia de especies huésped, como conejos y jabalíes, cuyas poblaciones están fuera de control en poblaciones como Gavà o toda la sierra de Collserola. Concretamente las inusuales altas temperaturas están favoreciendo que estas especies ya estén muy presentes incluso durante esta época del año.
Se habla de rareza porque se sabe que la también llamada ’Hyalomma’ es especialmente activa entre abril y julio, cuando busca sin parar posibles huéspedes, por lo que el riesgo de que se alimente de la sangre de las personas y, consecuentemente, a contraer enfermedades ha empezado antes de lo habitual.
Además, otro de los motivos es la mayor presencia de animales salvajes como los jabalíes, cada vez más asentados en áreas metropolitanas, o los conejos, que suponen un problema actualmente, sobre todo para el sector agrario catalán. Recordemos que aunque esta plaga de garrapatas se relacione también con mascotas como perros o gatos, ambas especies silvestres, estos animales son considerados unos huéspedes perfectos para el parásito.
¿Cómo prevenir la picadura de la garrapata?
Es importante destacar que las garrapatas suelen encontrarse en zonas al aire libre y en la naturaleza, por lo que es importante extremar la precaución si se practica senderismo, caza u otras actividades que requieran estar en contacto con la naturaleza. De hecho, según recomienda el Departamento de Salud de la Generalidad, hay que asegurarse de llevar la ropa adecuada para realizar la actividad antes de salir de casa. Es importante usar mangas largas y pantalones largos, así como evitar calzado abierto; es mejor optar por otras opciones como botas cerradas y con calcetines. Una vez en la naturaleza, hay que intentar caminar por el centro de los caminos y evitar el contacto con zonas donde la vegetación sea muy espesa.
Pero, si además de todo eso se quiere utilizar algún tipo de repelente es importante seguir las indicaciones de uso y asegurarse de que sean productos autorizados. Si se pasea con el perro por el campo, también se recomienda aplicar un antiparasitario externo que repela las garrapatas, que debe recomendar el veterinario. Al regresar a casa, no está de más examinarse de arriba a abajo, ya que las picaduras no suelen ser dolorosas y pueden pasar desapercibidas. También habría que revisar mascotas y pertenencias, ya que a veces las garrapatas pueden engancharse a la ropa o al pelaje de los animales y luego pasar a la persona.

