
Una investigación española ha revelado que un compuesto natural generado por el cuerpo durante el ayuno o dietas cetogénicas podría proteger el cerebro del deterioro cognitivo causado por una dieta rica en grasas saturadas. El trabajo, realizado por el Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER), la Universitat Internacional de Catalunya (UIC Barcelona) y la Universidad de Barcelona, se ha publicado en la revista científica Molecular Metabolism.
Un compuesto natural producido en ayuno
El compuesto en cuestión es el beta-hidroxibutirato, un cuerpo cetónico que el organismo produce cuando se reduce drásticamente la ingesta de hidratos de carbono. En estas condiciones —por ejemplo, en ayuno prolongado o siguiendo una dieta cetogénica— el cuerpo deja de usar glucosa como fuente principal de energía y empieza a utilizar grasas. El hígado transforma estas grasas en cuerpos cetónicos, entre ellos el beta-hidroxibutirato.
El estudio ha demostrado en modelos animales que este compuesto tiene efectos beneficiosos sobre el sistema nervioso. No solo mejora la plasticidad sináptica —clave para el aprendizaje y la memoria—, sino que protege directamente a las neuronas frente al daño causado por el ácido palmítico, el ácido graso saturado más presente en la dieta occidental.
Protección frente al daño cerebral inducido por la dieta
Rut Fadó, investigadora del área de Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición del CIBER (CIBEROBN), con sede en la Universidad de Barcelona y UIC Barcelona, y coordinadora del trabajo, explica que los resultados apuntan a una capacidad del beta-hidroxibutirato para restaurar funciones cerebrales deterioradas por una alimentación rica en grasas. La recuperación de la plasticidad sináptica y la protección neuronal observadas en los animales de laboratorio abre la puerta al uso de este compuesto como posible intervención preventiva o terapéutica.
Además de los efectos observados a nivel cerebral, los animales tratados con este suplemento presentaron menos aumento de peso pese a consumir una dieta rica en grasas, lo que sugiere un potencial efecto metabólico complementario.
Potencial como suplemento dietético
Aunque los resultados se han obtenido en modelos animales, los investigadores creen que el beta-hidroxibutirato podría estudiarse como suplemento dietético para prevenir o frenar el deterioro cognitivo asociado a enfermedades metabólicas como la obesidad. Estas enfermedades no solo afectan al metabolismo general del organismo, sino que también se han relacionado con un mayor riesgo de alteraciones cognitivas y deterioro neurológico en distintas etapas de la vida.
El estudio ha contado con la participación de tres grupos de investigación del CIBER, en las áreas de obesidad y nutrición (CIBEROBN) y enfermedades neurodegenerativas (CIBERNED). También han contribuido expertos de la Universidad de Castilla-La Mancha, la Universidad de Barcelona, la UIC Barcelona y el Albert Einstein College of Medicine de Estados Unidos.



