L D (Agencias)
A la oleada de intimidaciones que desde el mes pasado vienen formulando distintos frentes de los terroristas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) contra alcaldes, concejales y jueces, se sumaron el lunes advertencias similares a los alcaldes de Bogotá y Cali, así como al procurador general de la Nación. Las FARC, que a comienzos de año desataron una escalada de atentados que forzó al Gobierno a dar por concluidos el 20 de febrero tres años de frustradas negociaciones de paz, han anunciado paulatinamente que los alcaldes, concejales, diputados regionales y fiscales que no dimitan en 25 de las 32 regiones del país se convertirán en "objetivos militares".
Decenas de funcionarios de varios departamentos, entre ellos Arauca, Caquetá y Huila, ya dimitieron, mientras que en otras regiones, como Santander, los gobiernos regionales han anunciado que no aceptarán las renuncias y en unos casos más, los funcionarios despachan desde las capitales departamentales por seguridad. El lunes se confirmó que los alcaldes de las dos ciudades más pobladas de Colombia, el de Bogotá, Antanas Mockus, y el de Cali, John Maro Rodríguez, también están amenazados, pero los funcionarios afirmaron que no abandonarán sus cargos.
Asimismo, se denunciaron presiones contra el procurador general Edgardo Maya, cuya esposa, la ex ministra de Cultura Consuelo Araújo Noguera, fue secuestrada y asesinada por un frente de las FARC en septiembre del año pasado. Paradójicamente, las intimidaciones de los terroristas marxistas se agravaron con presiones similares de los paramilitares de derecha de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) a los alcaldes amenazados que renuncien. El presidente Pastrana, que termina su mandato de cuatro años el próximo 7 de agosto, declaró el lunes por la noche durante su despedida del cuerpo diplomático, que "la democracia colombiana está siendo atacada" por los grupos terroristas que, "no sólo atentan contra un Gobierno, sino contra toda la población del país".
Decenas de funcionarios de varios departamentos, entre ellos Arauca, Caquetá y Huila, ya dimitieron, mientras que en otras regiones, como Santander, los gobiernos regionales han anunciado que no aceptarán las renuncias y en unos casos más, los funcionarios despachan desde las capitales departamentales por seguridad. El lunes se confirmó que los alcaldes de las dos ciudades más pobladas de Colombia, el de Bogotá, Antanas Mockus, y el de Cali, John Maro Rodríguez, también están amenazados, pero los funcionarios afirmaron que no abandonarán sus cargos.
Asimismo, se denunciaron presiones contra el procurador general Edgardo Maya, cuya esposa, la ex ministra de Cultura Consuelo Araújo Noguera, fue secuestrada y asesinada por un frente de las FARC en septiembre del año pasado. Paradójicamente, las intimidaciones de los terroristas marxistas se agravaron con presiones similares de los paramilitares de derecha de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) a los alcaldes amenazados que renuncien. El presidente Pastrana, que termina su mandato de cuatro años el próximo 7 de agosto, declaró el lunes por la noche durante su despedida del cuerpo diplomático, que "la democracia colombiana está siendo atacada" por los grupos terroristas que, "no sólo atentan contra un Gobierno, sino contra toda la población del país".