
Trump o no mediante, la tan demorada secuela de La Pasión de Cristo, la película que en 2004 convirtió a Jesucristo en protagonista de un blockbuster, está a punto de caramelo. La recuperada figura de su director Mel Gibson en la administración Trump parece haber precipitado la demorada resurrección fílmica del personaje que volverá a encarnar, nunca mejor dicho, el actor Jim Caviezel, un film que el australiano llevaba tiempo intentando financiar.
Las cosas parecen encarriladas hasta tal punto que Gibson, visto en diversas localizaciones italianas buscando escenarios, ha dividido La Resurrección de Cristo en dos films: la Parte 1 llegará a los cines el 26 de marzo de 2027 y la Parte 2 el 6 de mayo, 40 días después.
La secuela de La Pasión, que narraba la captura, tortura y muerte de Cristo con abundancia de violencia y gore, recaudó unos monumentales 610 millones a nivel mundial, solo en cines y sin ajustar la inflación. Un récord para una película clasificada "R" que solo logró doblegar Deadpool y Lobezno el año pasado. Es, además, uno de los films independientes más taquilleros de la historia, capaz de movilizar grupos de espectadores a favor y en contra de su contenido y tratamiento.
Pero eso fue, claro, antes de la caída en desgracia de Gibson, detención y divorcio de Oksana Grigorieva mediante. Tras casi dos décadas viviendo su propio calvario, la que fue estrella de Mad Max y Arma Letal parece haber hallado un cierto y razonable equilibrio a la hora de enunciar sus opiniones políticas y financiar sus propios proyectos.
Y eso incluye una cierta dosis de rareza habitual en Gibson, que ha definido La Resurrección con un "viaje de ácido nunca visto", por su contenido onírico y diferencial. Lo que no es diferencial, pero sí testimonio de su ambición, es la división del proyecto en dos mitades, un lujo que solo se han permitido (con éxito) franquicias como Vengadores de Marvel o la última entrega de Harry Potter.
Licenciado en Historia del Arte y Comunicación Audiovisual en la UCM de Madrid. Colaborador en esRadio. Crítico de cine y series en Libertad Digital. Una de las voces del podcast Par-Impar.


