
La villa de Uclés, en el corazón de Cuenca, está coronada por un monumental Monasterio que guarda siglos de historia dentro de sus muros de piedra. Su majestuosidad es tan notoria que se hace imposible pasar cerca del pueblo sin detenerse a admirarla. Desde hace un tiempo, además, es la sede de uno de los proyectos culturales más interesantes e innovadores del país, como demuestra el hecho de haber sido reconocido recientemente como el mejor de toda Castilla la Mancha. Desde que el empresario y filántropo Fernando Núñez Rebolo se enamoró del monumento, la fundación que lleva su nombre no ha hecho más que tratar de convertirlo en el reclamo que en realidad ya es. Para ello, se ha creado el Laboratorio creativo de innovación cultural LaLAB, dedicado en cuerpo y alma a desentrañar los tesoros allí escondidos. Le ayudan mucho los siglos que atesoran sus paredes, así como el trabajo incesante de un equipo único, que ha conseguido entremezclar épocas muy diversas para acercarlas al público utilizando las técnicas audiovisuales más modernas. Gracias a su labor, Uclés se ha convertido en una visita obligada para todo amante del arte, de la historia y de la cultura.
Nada de lo dicho es una exageración. Lo demuestra el trabajo incesante de sus responsables, preocupados por renovar sus propuestas para que exista siempre un motivo por el que regresar al Monasterio. En esa vorágine creativa ha nacido Lux in Tenebris, un festival de música mística y de vanguardia que tendrá lugar en el recinto a lo largo de toda esta Semana Santa —entre el 14 y el 17 de abril—, y en el que, además, se podrá disfrutar de una serie de espectáculos nunca antes vistos. Durante los cuatro días que dure la programación, el visitante se verá inmerso en un universo que expondrá la tradición y el patrimonio allí encerrados a través de la música, el arte, el teatro, la tecnología y la narrativa audiovisual más avanzada de la actualidad.

Oficio de Tinieblas y otras actividades imprescindibles
El Oficio de Tinieblas es la propuesta estrella de la programación de Lux in Tenebris, y podrá disfrutarse tanto el Jueves, como el Viernes y el Sábado Santo. Se trata de una experiencia que transforma la liturgia de la Semana Santa en una obra de arte integral, que aúna música, teatro y narrativa contemporánea sobre la base de imágenes de la Diócesis de Cuenca, para componer un retablo audiovisual asombrosamente inmersivo. No será un mero concierto, ya que aspira a conseguir una reconstrucción histórica completa, que estimule al público y lo introduzca en una atmósfera personal y trascendente. La música, pese a todo, tendrá una importancia radical, además de configurar un espectáculo inédito, ya que por primera vez se contrapondrán los responsorios de Tomas Luis de Victoria con las lamentaciones de Cristobal de Morales, dos de los compositores principales del Romanticismo español. Además, sonará el canto llano toledano, las prácticas polifónicas improvisadas del fabordón, ministriles y la música renacentista de la Colección de Uclés a través de la polifonía sacra de Orlando di Lasso, Thomas Crecquillon y Philippe de Monte, quienes definieron la práctica musical de los territorios Habsburgo centroeuropeos de la Monarquía Hispánica.
Cada una de las piezas que conforman este Oficio de Tinieblas será interpretada por dos de las formaciones más reconocidas del país. En concreto, la Academia de los Nocturnos y el Ensemble de La Danserye, por lo que toda la experiencia estará coronada por un concierto de primera magnitud. Sin embargo, no será lo único de lo que podrá disfrutar el visitante. La propuesta teatral será insuperable gracias a los textos del dramaturgo Eusebio Calonge, llevados a escena por la compañía La Zaranda y gracias a la fuerza interpretativa de Laura Gómez-Lacueva. Su función será la de transformar la esencia de los textos bíblicos en relatos del presente, haciendo que todas las épocas hagan acto de presencia dentro del Monasterio de Uclés.
En función del día, los horarios para acudir al Oficio de Tinieblas variarán. Mientras que durante el Jueves y el Viernes Santo tendrá lugar por las mañanas, el Sábado Santo coincidirá con la caída del sol, empezando a las nueve menos diez de la noche. Esa última función será el acto más extraordinario de Lux in Tenebris, pues dará paso a una pieza de arte sonoro y audiovisual que interpretará las horas enigmáticas en las que Jesucristo estuvo dentro del sepulcro, generando un espacio de misterio y meditación inigualable. Todo un acontecimiento que hará las delicias de los amantes de la cultura.
Además del Oficio de Tinieblas, se sucederán diversas actividades que ofrecerán un catálogo nutrido de propuestas para los visitantes. La Vigilia, por ejemplo, será el evento más experimental de Lux in Tenebris, en el que se intercalarán arte, música y gastronomía. La intención es ofrecer una lectura contemporánea de la Vigilia Pascual a través de siete miradas artísticas diferentes. Transcurrirá durante la noche del domingo, haciendo que entre la medianoche hasta las seis de la madrugada el Monasterio se convierta en un escenario por el que desfilarán, entre otras cosas, artistas visuales, voces imponentes, instrumentos extraordinarios, música electrónica y flamenco.
El investigador especializado en música antigua José Hernández Pastor añadirá las notas renacentistas para iniciar la velada, seguido de un recital de organetto de la teclista histórica Cristina Alís Raurich, experta en música medieval. Julián Elvira, nombre de referencia y reconocido músico experimental, constituirá la tercera propuesta de la noche con su flauta travesera. Después, Miguel Ángel Orero, percusionista y compositor que se apoya en las nuevas tecnologías musicales, ofrecerá un nada convencional recital de marimba. Junto a ellos, artistas visuales y música electrónica completarán una madrugada coronada por la mágica música del guitarrista Raúl Cantizano, el dúo Los Voluble y Rosario La Tremendita, una de las grandes renovadoras del flamenco actual. Para terminar, a las seis de la mañana el compositor Pablo Martin Jones creará música a partir de objetos cotidianos en un espectáculo insólito, en el que se proyectará la propuesta visual de la cineasta y performer Marta Azparren.

Antes de concluida la velada, los visitantes podrán deleitarse con una selección de platos diseñados para transportar a quien los pruebe a la época representada. Los establecimientos de toda la villa se unirán al espectáculo, abriendo sus puertas para que el público pueda transitar por distintas localizaciones durante toda la noche.
Para cerrar Lux in Tenebris, el domingo una formación del prestigio de la Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid interpretará las notas que, de manera universal, evocan la alegría y la vida. Sonará entonces la Novena Sinfonía de Beethoven, llenando el Monasterio de ecos de otra época gracias a la ayuda de la tecnología más puntera. Con el bautizado como Concierto de la Alegría se pondrá fin a Lux in Tenebris, un festival diseñado para sorprender y transportar al espectador a través de la historia, configurando toda una experiencia de arte total. Algo que, sin ninguna duda, no puede pasarse por alto.
