Fue la novela más deseada en la Feria del Libro de Fráncfort. El año de la langosta (Planeta) es el regreso a la narrativa de ficción del periodista, escritor y guionista británico Terry Hayes, autor de la obra superventas Soy Pilgrim - cinco millones de ejemplares vendidos en todo el mundo-. Sus editores hablan de la combinación perfecta de John le Carré, Homeland y The last of us.
Hayes huye de encorsetamientos y su nuevo libro se mueve entre el género del espionaje y el thriller político, con Oriente Medio como principal escenario. "Esa zona del mundo es una caldera, no solo para los países implicados sino para todos nosotros. Es el lugar más caliente del mundo en cuanto a conflicto y también en cuanto a la actividad que desarrollan las agencias de espionaje", aseguró el autor en su visita a España.
El atentado del 11S también estuvo presente en su cabeza durante el proceso de escritura. "Lisboa, Berlín, Londres o París eran el centro de la acción en las novelas de espías del antiguo mundo, el de la Guerra Fría, pero hoy estamos presenciando una guerra caliente, la guerra contra el terrorismo. ¿Cuánto dinero ha gastado Occidente para ganar la guerra contra el terrorismo? ¿Billones? Al Qaeda necesitó como inversión inicial 250 mil dólares. Es un negocio realmente rentable y efectivo a nivel de costo".
La Inteligencia Artificial está "cambiando las reglas del juego". "Hoy en día existen drones nodriza que pueden cobijar a decenas de drones con objetivos muy específicos. Es imposible para un piloto controlar estos drones, pero la IA lo logra en segundos. Hay robot con forma de perros capaces de disparar armas automáticas. Antes, en la guerra se trataba de infligir el mayor daño posible al enemigo. Ahora lo importante es producir robot para causar daños. Los medios tradicionales no tienen sentido. De aquí a cinco o diez años, los tanques estarán controlados por IA y no lo conducirán humanos".
Precisamente, en la novela se describe el trabajo de los analistas de la CIA estudiando el material audiovisual que reciben en tiempo real de los satélites, los drones y las cámaras de seguridad hackeadas. "En mi libro hablo de tecnología militar altamente evolucionada. Los servicios de inteligencia de todas partes del mundo están produciendo tecnología de encubrimiento", asegura.
"El mundo cambia muy rápido y algo que era milagroso hace 30 años, como el fax, hoy ha desaparecido", defiende. "Si eres soldado, los cambios tecnológicos de hoy en día son positivos porque ya no morirás en el campo de batalla. Como persona con un sentido humanitario, las cosas están cambiando para muy mal. Se desarrolla tecnología que no controlamos ni sabemos hacia dónde va a ir. Estamos en unas circunstancias muy adversas".
En cuanto a los conflictos actuales, no es demasiado optimista: "Creo que la III Guerra Mundial será en Europa. La historia europea está bañada en sangre. Los ucranianos están haciendo todo lo posible por defender su territorio, pero realmente plantar oposición al dinero, el poderío industrial y la falta de escrúpulos de Rusia es una tarea casi imposible. Rusia seguirá luchando hasta que Estados Unidos o la OTAN tomen parte".
Al borde de la extinción
Hayes incorpora elementos de geopolítica que dotan al argumento de realismo. Ridley Kane -narrador en primera persona- es un espía de la CIA con experiencia para desenvolverse en las tierras fronterizas de Pakistán, Irán y Afganistán. Se encuentra allí a la búsqueda de un hombre con información vital para la seguridad de Occidente, pero se encuentra con un adversario que pretende llevar al mundo al borde de la extinción. Al-Tundra es uno de los fundadores del ISIS y, posteriormente, del Ejército de los Puros, del que es responsable militar.
Terry Hayes trabajó como periodista de investigación y ha escrito guiones para las películas Mad Max 2. El guerrero de la carretera, Mad Max 3. Más allá de la cúpula del trueno o Límite vertical, y ha colaborado en otros proyectos audiovisuales como Máximo riesgo o Plan de vuelo: Desaparecida. Sin duda, se traduce en lo cinematográficas que resultan sus novelas.
El escritor superventas ha tardado diez años en publicar su segunda novela, tiempo en el que ha compaginado la actividad creativa con la paternidad - ha tenido cuatro hijos en un lapso de seis años-. "Yo tuve una infancia difícil con una madre con problemas de salud mental. Y para mí era muy importante dedicarme a mis hijos", desveló. Precisamente, esta vertiente familiar tiene su reflejo en el protagonista de la novela. "Parto de un personaje que no solo quiere salvar al mundo, sino que quiere salvar a su propia familia. A partir de ahí, empecé a pensar en la estructura narrativa y fui tirando del hilo".
Hayes rompe la secuencia cronológica de la acción y adelanta hechos que sucederán posteriormente, poniendo a prueba los nervios del lector. "El protagonista es un padre que se enfrenta a una lucha en el futuro junto a sus dos hijos, que aún no conoce en el presente", adelanta.
Para el autor, es muy importante crear un enemigo "complejo" que no sea "simplemente villano". "Quien combate por la libertad para un bando, puede ser considerado terrorista por el otro. Cuando escribo, siempre, pienso en una situación de extremo conflicto y miseria, pienso cuál es el motivo para que se de esa situación. Me parece fundamental darle al villano de la historia la dignidad que le aporta la inteligencia y la motivación para hacer lo que hace", dice. Su apuesta pasa por sacar provecho a la "complejidad de un situación geopolítica" y desarrollar "cómo hace que las personas reaccionen".
Terry Hayes. El año de la langosta. Editorial Planeta, 2024. ISBN 978-84-08-28979-1. 848 páginas. PVP: 23,90€