Bad Bunny incluye intérpretes de signos en sus conciertos y perrean desde la inclusión

La música de Bad Bunny no solo se escucha, también se siente. El artista puertorriqueño ha incluido a intérpretes de lengua de signos en sus conciertos en el Coliseo de Puerto Rico, logrando que la comunidad sorda también pudiera disfrutar de sus canciones al ritmo de la música urbana.

Gracias a esta iniciativa, cientos de personas con discapacidad auditiva perrearon y se conectaron con los mensajes de sus temas de su nuevo álbum ‘Debí Tirar Más Fotos’. La traducción en vivo, acompañada de gestos, energía y movimientos al compás de la música, hizo posible que el espectáculo fuese inclusivo y accesible.

Este colectivo, que muchas veces queda excluido de los grandes eventos musicales, encontró en el show una forma única de vivir la música, pues pueden sentir la vibración de la música en su cuerpo, y combinadas con la interpretación en lengua de señas, los asistentes sordos pudieron comprender, sentir y apropiarse de la experiencia.

Los intérpretes, estratégicamente ubicados en distintos puntos cerca del escenario y las gradas, se movían con la misma intensidad que los bailarines y el propio Bad Bunny, sincronizando sus gestos con cada beat. Así, lograron transformar las letras en un espectáculo visual que complementaba la potencia sonora.

Durante el concierto, muchos asistentes no solo se dejaron llevar por la energía de Bad Bunny, sino también por la entrega de los intérpretes de señas. "Admiración por estas personas", escribían en redes sociales al ver cómo traducían cada verso mientras bailaban al ritmo de la música, provocando aplausos y hasta un poco de envidia por la pasión y el talento con que vivían el espectáculo.

Algunas de las personas asistentes con algún grado de sordera han descrito el concierto como una "experiencia maravillosa" y agradecen la accesibilidad y la inclusión.