Las Fuerzas Armadas Francesas han realizado una prueba con fuego real para probar la capacidad de sus drones marítimos no tripulados. En el experimento se ha dirigido un dron marino contra un buque fuera de servicio.
El Jefe del Estado Mayor de la Marina francesa ha publicado en su cuenta de X el vídeo que muestra el momento exacto en el que el dron explota contra el buque. "La Armada también está probando sus propios drones de ataque y municiones operadas a distancia para aumentar su letalidad", ha comentado el almirante Nicolas Vaujour junto al vídeo.
Marine redoutée. La Marine protège la liberté de navigation en mer Rouge contre toutes les menaces, dont les drones. La Marine teste aussi ses propres drones d'attaque et munitions télé-opérées pour augmenter sa létalité. pic.twitter.com/4MgQdfaVyx
— Chef d'état-major de la Marine (@CEMM_FR) April 29, 2025
Los USV (Unmanned Surface Vehicles) son embarcaciones no tripuladas que operan en la superficie del agua y pueden utilizarse para diversos fines. La principal ventaja que ofrecen estos drones es que pueden equiparse con más sensores y equipos que una nave tripulada de tamaño equivalente. Además, según Unmanned Systems Technology, estas embarcaciones están capacitadas para portar "cargas útiles de armas o un pequeño vehículo submarino no tripulado". Por tanto, el uso de estos drones sirve para "crear una ventaja asimétrica contra las defensas navales convencionales", como señalan desde Naval Defense.
Más pruebas francesas en el mar
Francia ha estado realizando pruebas con fuego real en los últimos meses, desde el lanzamiento de un misil F21 en diciembre de 2024. Este tipo de misil esta diseñado para equiparse a los submarinos franceses de clase Rubis y Suffren y es capaz de destruir amenazas en la superficie y submarinas, según el comunicado de prensa oficial.
"Dado el endurecimiento del contexto internacional y la introducción de la última generación de municiones complejas, ahora parece apropiado y posible volver a este tipo de pruebas de armamento en el mar de forma puntual", señala el comunicado de diciembre de 2024.
De igual manera, en febrero la Armada Francesa llevó a cabo otra prueba frente a la costa de Tolón, en el sureste de Francia. En esta prueba, la fragata Courbet, de clase La Fayette fue objeto de una explosión para comprobar la resistencia de la embarcación en caso de ataque real. Además, La Armada Francesa no realizaba una prueba de estas características desde el año 1995 por lo que queda de manifiesto la preocupación de Francia por "el endurecimiento del contexto internacional".