El internacional español Óscar Mingueza, futbolista del Celta, vio la tarjeta roja a la conclusión del encuentro contra el Athletic Club por protestar y llamar "chulo" al colegiado.
El árbitro, Ortiz Arias, escribió en el acta que el jugador del Celta le dijo: "Ha habido cuatro faltas y a mi no me pintas ni una, tú eres un chulo".
El extremo celeste se perderá, por tanto, el próximo partido de liga contra el Deportivo Alavés, un rival directo en la pelea por eludir el descenso de categoría.
Arias, uno de los árbitros más déspotas, solo sacó dos tarjetas en el partido. Una la roja a Mingueza y otra amarilla para un jugador del Celta, en este caso a Ilaix Moriba antes de que saliera al campo en el minuto 64 sustituyendo a Fran Beltrán. Mientras estaba en el banquillo fue amonestado. "En el minuto 60 el jugador (6) Kourouma Kourouma, Moriba fue amonestado por el siguiente motivo: Por protestar una decisión al árbitro asistente n°1 mientras realizaba ejercicios de calentamiento en la zona habilitada para ello", ha reflejado Arias en el acta.
No es la primera vez que Ortiz Arias expulsa a un jugador del Celta por hacerle un comentario despectivo. Durante el Real Sociedad - Celta de febrero de 2023, el colegiado mostró doble amarilla a Renato Tapia, centrocampista del club gallego, ahora en el Leganés. El peruano vio la primera cartulina por "pisar a un adversario de forma temeraria" y la segunda por "poner objeciones a una decisión mía tras haber sido amonestado". Además, en un anexo, Ortiz Arias señaló que el internacional "una vez expulsado y estando aún sobre el terreno de juego se dirigió a mí en los siguientes términos: '¡Qué prepotencia!". Por esto, tuvo que cumplir tres partidos de sanción.
Desde fuera cuesta entender como un colegiado que lleva ya alguna temporada en Primera, una vez que ha terminado ya el partido y a un jugador como Óscar Mingueza, que es de los más blanditos y educados, le saca una tarjeta roja en un contexto en el que terminas de perder un partido en casa y tras caer en Copa con la polémica arbitral que tanto dolió al celtismo el jueves en el Bernabéu.