Marina García, en los 200 braza, y Rafa Muñoz, en los 100 mariposa, han dado las primeras medallas, dos de plata, al equipo español en los Campeonatos de Europa de piscina corta que celebran su segunda jornada en la ciudad francesa de Chartres.
Marina García, de 18 años, ha sido segunda en la final de los 200 metros braza, batiendo el récord nacional. La nadadora de Barcelona paró el crono en 2:20.57 para rebajar el récord de España, que estaba en poder de Mireia Belmonte, en 2:21.65, desde los Mundiales de Manchester de 2008 cuando se competía con los bañadores fabricados con derivados del plástico. La danesa Rikke Pedersen, plusmarquista continental, ganó la final con 2:17.26, y la ucraniana Ganna Dzerkal la medalla de bronce con 2:21.94.
Muñoz no pudo con el ruso Evgeny Korotyshkin. Éste se llevó la medalla de oro con 49.98 por 50.39 del español, que llegó a la final con el mejor crono de los ocho participantes, y los 50.66 del francés Medhy Metella, bronce con 50.66.
Por su parte, otro español, Juan Miguel Rando, cayó en las semifinales de los 50 metros espalda con el decimotercer mejor crono, el séptimo de su serie, 24.27. El mejor fue el francés Jeremy Stravius con 23.37, ganador de la semifinal del español.
En los 800 libre, María Vilas, nacida en 1996, una de las jóvenes promesas de la natación española, fue séptima con 8:25.31 por los 8:10.24 de la danesa Lotte Friis, medalla de oro. Vilas rebajó la mejor marca nacional de 16 años.
