El ciclista colombiano Darwin Atapuma corre el Giro de Italia un día después de que falleciera su madre

Se dice que los ciclistas están hechos de otra pasta. Y se suele hacer referencia a las duras caídas que sufren, pero se vuelven a levantar, como si nada hubiera pasado, en busca de terminar esa etapa. Pero lo que le ha ocurrido al ciclista colombiano del conjunto BMC Darwin Atapuma va más allá.

El día antes de comenzar el Giro de Italia -el viernes 8 de meyo-, Atapuma conoció el fallecimiento de su madre. Una triste noticia que, sin embargo, no le impidió tomar parte en la salida de la primera etapa, la crono por equipos en la que el cuadro BMC fue séptimo a 25 segundos del Orica, los ganadores.

Al llegar a meta, y preguntado por periodistas colombianos, Atapuma sólo tenía palabras para su madre. "Decidí quedarme por ella. Se que no voy a volver a verla más. Sólo queda el recuerdo de una buena madre. Y espero darle un bonito regale a mi madre", dijo el ciclista colombiano entre lágrimas.

Le quiere dedicar a su madre la clasificación de la montaña, una etapa o terminar entre los diez mejores de la clasificación. Algo que hará con el recuerdo de su madre presente.