
Una fecha clave en el calendario. 31 de mayo de 2025. Este día da comienzo en Guernica la Liga de Naciones, el torneo en el que Euskadi tiene planeado debutar como equipo propio a nivel internacional. Esa participación como miembro de pleno derecho podría venir acompañada de la ausencia de España, quien podría ser expulsada de la Federación Internacional de Pelota Vasca (FIPV) este jueves 20 de marzo.
Este escenario de polémica e incertidumbre se ha ido creando en los últimos meses tras la histórica decisión de la FIPV de admitir como miembros de pleno derecho a federaciones que no fueran nacionales, empezando por la de Euskadi. En aquella Asamblea Ordinaria, que tuvo lugar el 28 de diciembre del pasado año en Pamplona, se modificaron los estatutos sin la participación de España y Cuba, quienes no pudieron votar al estar inhabilitados sus respectivos representantes.
Además, otros cuatro países con derecho a voto no estuvieron presentes. El cambio de estatuto no previsto en el orden del día salió adelante con seis votos a favor (Argentina, Venezuela, México, Francia, Perú y Portugal), una abstención (Costa Rica) y un voto en contra (Chile). Ante esta situación, la Federación Española de Pelota (FEPelota) impugnó aquella votación ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo en Lausana (Suiza) el 13 de enero al considerar irregular el proceso, cuando Julián García Angulo, presidente de la FEPelota desde 1991, encabezaba la comisión gestora durante el proceso electoral que acabaría con Javier Conde como nuevo presidente.
La respuesta de la Federación Vasca
Xavier Cazaubon, el presidente de la FIPV, solicitó al ente presidido por Javier Conde que retirase la demanda presentada, pero no encontró aceptación. Según fuentes cercanas a la negociación, existen tres opciones sobre la mesa. La primera pasaría porque la Federación Española retire la demanda contra la Internacional y la Vasca, y podría seguir participando en las competiciones de la FIPV. La segunda sería una oferta de mediación que evitaría la adopción de medidas disciplinarias.
En un último caso, España quedará fuera automáticamente de las competiciones de la Internacional si Conde y su junta directiva no acepta ninguna de las dos salidas. La Federación Vasca, quien se sienta atacada, ha decidido dar un paso al frente y expulsar a La Rioja del GRABNI, uno de los torneos regionales más prestigioso del calendario, que se celebra cada año enfrentando a pelotaris de Guipúzcua, Álava, Vizcaya, Navarra, Iparralde (País Vasco francés) y, hasta ahora, La Rioja.
El pacto PNV-PSOE
El desencadenante de todo ha sido la Ley del Deporte modificada en 2022 y que entró en vigor el 1 de enero de 2023. PNV y PSOE pactaron a última hora incluir un artículo, el 48.2, que abría la puerta a la participación de federaciones autonómicas en el ámbito internacional, siempre que el ente superior lo contemplara y que se tratase de modalidades con arraigo histórico y social en dicha comunidad. Un acuerdo que respondía a las pretensiones de la pelota vasca y que tenía un trasfondo político siendo parte del acuerdo de investidura entre ambos partidos.
Después de dos reuniones con el Consejo Superior de Deportes como elemento mediador, el miércoles 12 de marzo en Madrid tuvo lugar una aproximación en la que no hubo acuerdo y se emplazaron de nuevo a este miércoles 19. El CSD se enfrenta al dilema de defender los intereses del deporte español sin incomodar a los nacionalistas vascos, socios clave del actual Gobierno socialista. Respaldar la inscripción de la Federación Vasca, como le exigirán sus aliados, podría debilitar la unidad del deporte nacional en competiciones internacionales, algo que tampoco sería bien visto por el COI.
El PP pide explicaciones inmediatas
Las informaciones sobre el reconocimiento de Euskadi ha desencadenado las primeras reacciones políticas. Desde el Partido Popular, se han mostrado críticos con el Gobierno. Su portavoz nacional, Borja Sémper, ha asegurado al periódico deportivo MARCA que "mientras el Ejecutivo mira hacia otro lado, se pone en riesgo la representación de España en el ámbito internacional". Además, exigen "explicaciones inmediatas y medidas urgentes para frenar esta deriva que debilita nuestra identidad deportiva y compromete la presencia de nuestras selecciones en competiciones internacionales".
Sémper ha insistido: "Exigimos al Presidente del CSD que pise su despacho por primera vez en mucho tiempo para trabajar en favor del deporte español". El portavoz del Partido Popular apunta: "Los socios del Gobierno han olido sangre y van a reventar el deporte español para favorecer a sus intereses". Asimismo, asegura que "ya presentamos una proposición de ley, que fue rechazada. Ahora vamos a pedir la comparecencia de la ministra de educación y deporte, entre otras medidas".


