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Los Timberwolves de un Ricky poco acertado superan a los Pistons en el regreso de Calderón

La franquicia de Minnesota venció por 107-101 a los Pistons y le dio el triunfo número 1.000 como profesional al veterano entrenador Adelman.

La franquicia de Minnesota venció por 107-101 a los Pistons y le dio el triunfo número 1.000 como profesional al veterano entrenador Adelman.
Ricky Rubio y Calderón disputan un balón. | EFE

El veterano entrenador de los Timberwolves de Minnesota, Rick Adelman, vivió su mejor alegría esta temporada al ver cómo su equipo vencía por 107-101 a los Pistons de Detroit y le daban el triunfo número 1.000 como profesional. Adelman se convierte en el octavo entrenador en la historia de la NBA que lo consigue.

Nikola Pekovic se convirtió en el líder del equipo al aportar un doble-doble de 20 puntos, 13 rebotes y dos asistencias que lo dejaron al frente de una lista de siete jugadores, incluidos cuatro titulares, que tuvieron números de dos dígitos.

Ricky Rubio y el alero reserva Chase Budinger lograron 10 tantos cada uno y completaron la lista de los encestadores que lograron números de dos dígitos. El base español, de nuevo no tuvo su mejor toque de muñeca, y falló 12 de 13 tiros de campo, incluidos dos intentos de triples, pero acertó 8 de 9 desde la línea de personal, repartió seis asistencias, capturó cinco rebotes, recuperó cinco balones y perdió tres.

Tampoco tuvo buena jornada porque recibió el aviso por parte de la NBA de que había exagerado una acción contra el alero Kevin Durant, de los Thunder de Oklahoma City, para que le pitasen falta personal.

José Manuel Calderón, que se había perdido el partido anterior frente a los Celtics, volvió de titular con los Pistons y tampoco pudo ser factor ganador al aportar sólo seis puntos.

El base jugó 27 minutos en los que anotó 3 de 5 tiros de campo, repartió cuatro asistencias, capturó dos rebotes, recuperó tres balones, y perdió otros tres.

El momento más emotivo de la noche en el Target Center llegó al concluir el partido y los aficionados comenzaron a entonar el nombre de "Adelman, Adelman, Adelman". El entrenador de los Timberwolves, que siempre ha rechazado ser el centro de atención, se unió a su esposa Mary Kay para un emotivo abrazo y beso.

"Se merece estar aquí a mi lado", declaró Adelman después del partido. "Ha sido la única razón que me ha permitido conseguir todo lo que he hecho estos años".

Adelman tiene marca de 1.000-702 en los 22 años de carrera como entrenador, y se une a los legendarios Don Nelson, Lenny Wilkens, Pat Riley, Phil Jackson, Jerry Sloan, Larry Brown y George Karl en el exclusivo club de los 1.000 triunfos, que como ya es habitual esta temporada con los Timberwolves, también tuvo suspense.
 

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