Cada partido que disputan Rafa Nadal y Novak Djokovic parece ser más importante que los anteriores, porque lo que se decide es algo más que un partido, son choques que quedan grabados en la historia del tenis. La final del Abierto de Estados Unidos que disputarán ambos jugadores también pone en juego el cetro del tenis mundial y el broche a una temporada para el recuerdo.
Los 20.000 espectadores que llenarán el estadio Arthur Ashe vivirán un duelo que ya se ha convertido en clásico, entre los actuales números uno y dos del ranking mundial. Nadie en la historia de la era Open se ha enfrentado más que el español y el serbio. Hasta en 37 ocasiones se han visto la cara en las pistas y ya han superado en número de duelos a Ivan Lendl y John McEnroe, que se encontraron en 36 ocasiones.
Flushing Meadows verá por tercera vez una final entre Nadal y Djokovic por el último Grand Slam del año. Ambos llegan igualados, de las dos finales que disputaron la victoria fue una vez para cada uno y el partido, además, decidirá en gran medida qué jugador acabará el año como número 1. Nadal parte con ventaja para acabar en el primer puesto y pondría así fin a una temporada excepcional. Regresó en febrero a la competición después de siete meses parado por sus rodillas, y conquistó nueve títulos de 12 posibles. El balear llega a la final de Nueva York en el mejor momento de su carrera sobre pista dura, con un juego poderoso y fiable, que le ha permitido mantenerse imbatido en dicha pista y haber perdido solo tres choques en 2013.
Enfrente estará Djokovic en su superficie favorita, en la que se siente más cómodo. Pero el balcánico llega con algunas dudas después de ganar en semifinales al suizo Wawrinka en cinco sets. Nadal solo ha cedido un set en el torneo y su gran momento de forma deja una final con pronóstico incierto. "No ha perdido un partido en todo el año y todos sabemos que no es su superficie favorita. Sufrió muchas lesiones en estas canchas, pero ahora está sano. Es el mejor jugador del momento, no tengo ninguna duda", comentó Djokovic sobre el balear.
"Siempre jugamos partidos muy emocionantes. Este tipo de partidos son especiales. Incluso la final que perdí en Australia. El cansancio no existe, tienes que dejarlo todo y por mí no va a quedar. Voy a pelear por llegar bien preparado mentalmente, físicamente y tenísticamente. Necesito unir esas tres cosas para tener opciones de victoria", afirmó Nadal que espera ganar el decimotercer Grand Slam de su carrera en otra final para el recuerdo.