
Rafa Nadal y Alexander Zverev mantienen una buena relación fuera de la pista, pero eso no evita que el campeón español dé su opinión objetiva de la escasa sanción a la que se tendrá que enfrentar el alemán por dar raquetazos a la silla del colegiado en Acapulco. Ha que recordar que Zverev fue expulsado del torneo por estos hechos y la ATP le ha puesto una sanción de ocho semanas de suspensión y 23.000 euros, sin embargo, solo se hará efectiva en caso de que Alexander reincida en los próximos 12 meses. Traducción: no hay sanción.
Rafa Nadal ha dejado clara su postura pese a su amistad con Zverev: "Estoy en una posición difícil. Estoy dividido porque tengo una buena relación con 'Sasha' y es alguien a quien aprecio, pero él sabe que se equivocó y lo reconoció muy rápido. Eso es positivo, pero por otro lado, si no somos capaces de controlar este tipo de comportamientos en la pista o encontrar la manera de sancionarlos de una manera más fuerte, entonces los jugadores podemos tener una sensación de impunidad".
Nadal insiste en dar ejemplo a la cantera mundial del tenis: "Como en todos los deportes, debemos ser ejemplos positivos para los jóvenes que nos miran. Así, por un lado, no quiero que castiguen a 'Sasha', pero por el otro me gustaría ver sanciones más duras por este tipo de comportamiento, porque protegerán al deporte, a los árbitros y a todos los presentes en un partido".
Por otro lado, Rafa Nadal destacó la importancia que tiene para él poder disputar de nuevo un Masters 1000 como el de Indian Wells: "Llevo aquí más de una semana. Siempre disfruto aquí. Es uno de mis torneos favoritos, sin duda. Lo tomo día a día, solo tratando de disfrutar el momento. Es inesperado para mí estar en esta posición, así que lo disfruto todos los días y trato de disfrutar también del hecho de que estoy jugando bien. Ya he ganado tres títulos este año y eso es increíble para mí"
