LD (EFE)
En la presentación del informe anual ante el Consejo de Gobierno del Banco de España, Caruana reseñó que el valor de los inmuebles "podría haber sobrepasado los niveles coherentes", por lo que resulta "probable y deseable" que las tasas de crecimiento del precio de la vivienda comiencen a reconducirse de una manera progresiva y ordenada hacia registros más acordes con las causas que provocaron su espectacular incremento.
Según Caruana, estas causas son la evolución de la pirámide poblacional, la inmigración, la demanda de segundas residencias, el aumento de la renta y el descenso de los tipos de interés. Además de la desfavorable evolución de las bolsas en los últimos años, que ha incrementado el atractivo de oportunidades alternativas de inversión, añadió.
El gobernador del Banco de España apuntó que la "reconducción" de los precios del mercado inmobiliario debería ir acompañada de una moderación del crédito, todo lo cual reduciría la probabilidad de que se produzcan "ajustes más bruscos" en un mercado tan influyente sobre el conjunto de la economía.
Valora la marcha de la economía española pero advierte de la necesidad de abordar nuevos retos
En su discurso, Caruana valoró la notable capacidad mostrada por la economía española en 2002 para mantener un ritmo de crecimiento comparativamente elevado y seguir generando empleo en un contexto externo adverso. Esta resistencia a la desaceleración, explicó, fue posible gracias a la estabilidad macroeconómica y las reformas estructurales, y aludió en concreto al efecto beneficioso de la política fiscal y al mejor funcionamiento del mercado laboral.
Caruana vaticinó un mayor dinamismos de la actividad a medida que vaya mejorando el clima internacional, pero recordó que será imprescindible abordar nuevos retos ante la mayor competencia que provocará la ampliación de la Unión Europea (UE). En este sentido, instó a modificar el patrón de crecimiento , para que no descanse tanto en el consumo y la construcción, como ha sucedido en los últimos años, sino en mayor medida en la inversión y las exportaciones.
Además, en materia fiscal podría ser conveniente avanzar hacia el superávit , sobre todo si persistiese un diferencial de inflación con la zona euro no justificado por el proceso de convergencia real, apuntó. Un saldo presupuestario positivo, explicó, ayudaría a afrontar los problemas de sostenibilidad a largo plazo del sistema de pensiones.
Caruana abogó, asimismo, por la moderación salarial y el aumento de la productividad, con objeto de mantener la competitividad, factor clave ante la ampliación de la UE. Por ello, reclamó cambios en el sistema de negociación colectiva, para adaptar sus resultados a la situación concreta de las empresas, y más estímulos a la contratación estable. Además, Caruana insistió en la importancia de intensificar la inversión , sobre todo en bienes de equipo, estancada en los últimos años, para elevar la productividad y avanzar en la incorporación de las nuevas tecnologías.
Según Caruana, estas causas son la evolución de la pirámide poblacional, la inmigración, la demanda de segundas residencias, el aumento de la renta y el descenso de los tipos de interés. Además de la desfavorable evolución de las bolsas en los últimos años, que ha incrementado el atractivo de oportunidades alternativas de inversión, añadió.
El gobernador del Banco de España apuntó que la "reconducción" de los precios del mercado inmobiliario debería ir acompañada de una moderación del crédito, todo lo cual reduciría la probabilidad de que se produzcan "ajustes más bruscos" en un mercado tan influyente sobre el conjunto de la economía.
Valora la marcha de la economía española pero advierte de la necesidad de abordar nuevos retos
En su discurso, Caruana valoró la notable capacidad mostrada por la economía española en 2002 para mantener un ritmo de crecimiento comparativamente elevado y seguir generando empleo en un contexto externo adverso. Esta resistencia a la desaceleración, explicó, fue posible gracias a la estabilidad macroeconómica y las reformas estructurales, y aludió en concreto al efecto beneficioso de la política fiscal y al mejor funcionamiento del mercado laboral.
Caruana vaticinó un mayor dinamismos de la actividad a medida que vaya mejorando el clima internacional, pero recordó que será imprescindible abordar nuevos retos ante la mayor competencia que provocará la ampliación de la Unión Europea (UE). En este sentido, instó a modificar el patrón de crecimiento , para que no descanse tanto en el consumo y la construcción, como ha sucedido en los últimos años, sino en mayor medida en la inversión y las exportaciones.
Además, en materia fiscal podría ser conveniente avanzar hacia el superávit , sobre todo si persistiese un diferencial de inflación con la zona euro no justificado por el proceso de convergencia real, apuntó. Un saldo presupuestario positivo, explicó, ayudaría a afrontar los problemas de sostenibilidad a largo plazo del sistema de pensiones.
Caruana abogó, asimismo, por la moderación salarial y el aumento de la productividad, con objeto de mantener la competitividad, factor clave ante la ampliación de la UE. Por ello, reclamó cambios en el sistema de negociación colectiva, para adaptar sus resultados a la situación concreta de las empresas, y más estímulos a la contratación estable. Además, Caruana insistió en la importancia de intensificar la inversión , sobre todo en bienes de equipo, estancada en los últimos años, para elevar la productividad y avanzar en la incorporación de las nuevas tecnologías.
