L D (Agencias)
La juez Jimeno basó su decisión, adoptada el 9 de diciembre de 2002, y confirmada el pasado 14 de febrero, en “la naturaleza, gravedad, entidad y duración” de la condena de 20 años de cárcel que impuso a Conde el Tribunal Supremo por el “caso Banesto” el pasado mes de julio, fecha en la que el ex banquero reingresó en la cárcel madrileña de Alcalá-Meco.
El recurso de apelación contra la resolución será estudiado por la Audiencia Nacional, y no por la Audiencia de Madrid, al ser la primera la Sala que dictó la sentencia inicial contra Conde por esta causa. La Sección Primera de la Audiencia, presidida por el magistrado Siro García, condenó a Mario Conde a 10 años de prisión, pena que fue elevada a 20 años por el Supremo.
En la vista de apelación, el abogado de Conde defenderá sus argumentos para pedir el tercer grado penitenciario para su cliente, entre ellos el hecho de que la Audiencia Nacional ha refundido sus condenas por los casos Argentia Trust y Banesto en una sola de 18 años de prisión, que tiene parcialmente cumplida por el tiempo que estuvo en la cárcel por la primera causa. Sin embargo, tanto el fiscal de Madrid como la juez de Vigilancia Penitenciaria, creen que no reúne los requisitos para pasar al tercer grado. Además, la magistrada ha vinculado en sus resoluciones la reinserción del ex banquero a que abone la indemnización de 3.763 millones de pesetas (22,6 millones de euros) que fue condenado a pagar por el “caso Banesto”.
La juez Reyes Jimeno fue recusada en diciembre por Mario Conde, pero su compañero José Luis de Castro, juez de Vigilancia número 3, rechazó la recusación. La tercera juez de Vigilancia de Madrid, Prado Torrecilla, ha sido sancionada con siete meses de suspensión de funciones por el Consejo General del Poder Judicial, por presionar a sus compañeros en favor de la concesión del tercer grado al ex banquero.
El recurso de apelación contra la resolución será estudiado por la Audiencia Nacional, y no por la Audiencia de Madrid, al ser la primera la Sala que dictó la sentencia inicial contra Conde por esta causa. La Sección Primera de la Audiencia, presidida por el magistrado Siro García, condenó a Mario Conde a 10 años de prisión, pena que fue elevada a 20 años por el Supremo.
En la vista de apelación, el abogado de Conde defenderá sus argumentos para pedir el tercer grado penitenciario para su cliente, entre ellos el hecho de que la Audiencia Nacional ha refundido sus condenas por los casos Argentia Trust y Banesto en una sola de 18 años de prisión, que tiene parcialmente cumplida por el tiempo que estuvo en la cárcel por la primera causa. Sin embargo, tanto el fiscal de Madrid como la juez de Vigilancia Penitenciaria, creen que no reúne los requisitos para pasar al tercer grado. Además, la magistrada ha vinculado en sus resoluciones la reinserción del ex banquero a que abone la indemnización de 3.763 millones de pesetas (22,6 millones de euros) que fue condenado a pagar por el “caso Banesto”.
La juez Reyes Jimeno fue recusada en diciembre por Mario Conde, pero su compañero José Luis de Castro, juez de Vigilancia número 3, rechazó la recusación. La tercera juez de Vigilancia de Madrid, Prado Torrecilla, ha sido sancionada con siete meses de suspensión de funciones por el Consejo General del Poder Judicial, por presionar a sus compañeros en favor de la concesión del tercer grado al ex banquero.
