La versión de la Agencia Tributaria, la Abogacía del Estado y la Fiscalía Anticorrupción para exonerar a doña Cristina de las actividades irregulares de Aizoon y Nóos, pese a figurar formalmente en todas las fases de la trama, acaba de quedar en entredicho. Todas afirmaban que la infanta Cristina nunca fue consciente de lo que sucedía en esas empresas en cuya Junta Directiva estaba integrada, o en las que tenía el 50% de la propiedad. De esa forma ha conseguido ir eludiendo la imputación.
Según publica el diario El Mundo este viernes, la infanta Cristina recibió a su nombre la correspondencia de los extractos bancarios de la Visa de Aizoon. Así se desprende de uno de los correos electrónicos aportados por el exsocio de Urdangarin, Diego Torres, al juez Castro. En el correo, dirigido por el contable del Grupo Nóos, Marco Tejeiro, al BBVA el 3 de octubre de 2006, se informaba de que "te escribo para informarte que estáis enviando correspondencia de VISA de Aizoon (cc. 0182 1007 26 0201520992) a Diagonal 550, 2º, 2ª de Barcelona a nombre de Cristina de Borbón de Grecia (sic)". Así, Tejeiro pide que se varíe por completo la operativa con el objetivo de que la vinculación de la hija del Rey con la trama, dedicada a detraer los fondos de Nóos para introducirlos en los bolsillos del matrimonio, no circulase alegremente por el grupo.
Así, se le solicitaba a BBVA que cambiara la dirección de envío a la de "Avenida de las Corts Catalanes 8, 1ª Planta. 08173. Sant Cugat del Vallés", para que pasara inadvertida la vinculación de doña Cristina con el grupo. Tanto es así que en el correo puede leerse cómo el contable del Instituto Nóos pedía que "con poner el nombre de las empresas es suficiente; no hace falta que en el sobre se vea el nombre de la Infanta".
El contenido de este correo deja, pues, sin argumentos a la defensa de la infanta cuando afirmaba que doña Cristina no estaba al tanto de las operaciones en Aizoon. De confirmarse la veracidad de este correo, la hija del rey no sólo recibía los extractos de la visa de Aizoon con las operaciones del grupo, sino que su contable pidió al banco que eliminara el nombre de la infanta de la correspondencia para que no se la relacionara con la trama.