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Aizpeolea enmienda la plana a 'Gara' y anuncia la disolución de ETA en 'El País'

Las portadas son variopintas con gran protagonismo de ETA.

El Mundo retoma la interminable ristra de chorizadas de UGT. "UGT compraba 10 cuadernos y le facturaba a la Junta 7.000". Pues si que andaban despistados los de la Junta. Le dice Pedro J. a Cándido Méndez que no se haga el remolón. "Para limpiar de corruptos una organización no hace falta esperar a las resoluciones judiciales (...) La actitud dontancredista del líder de UGT ante estos flagrantes casos en Andalucía es la mejor demostración de la inexplicable tibieza con la que el sindicato socialista trata su corrupción interna".

También cuenta el periódico que "el PP propone al PSOE actos conjuntos para frenar a Mas". Dice Pedro J. que fenómeno, pero que "nunca puede sustituir la necesaria acción del Gobierno", que si quiere hacer migas con el PSOE que las haga, pero "los ciudadanos le han dado al PP la mayoría absoluta para que resuelva los problemas y, en este caso, el ejecutivo ha pecado hasta ahora de inacción". Le lleva la contraria su vicedirector Casimiro García-Abadillo. "Rajoy debería construir un gran pacto de Estado con el PSOE y otros partidos para establecer las líneas rojas que la Generalidad no debe traspasar". ¿Todavía estamos buscando líneas rojas? Pues apañados vamos.

Federico Jiménez Losantos puntualiza los términos que hay que utilizar para referirse al asunto catalán porque "la primera batalla que se gana o se pierde en política es la de los nombres". Dice que algunos medios, "con El País a la cabeza" se empeñan en llamar soberanistas a los separatistas catalanas. "Soberanista es el que defiende la soberanía del pueblo español expresada en la Constitución. Y el que defiende la cesión de sobernanía nacional española a la UE. El que quiere separarse de España y crear un estado catalán se dirá soberanista, como los etarras gudaris, pero desde el punto de vista español es simplemente separatista. Y así hay que llamarlo".

El País abre su portada con que "EEUU solicita a España ampliar un 50% su fuerza militar en Morón" y que "los diputados rebeldes del PSC retan al partido a que les expulse", aunque la información más interesante la esconden en la página 11. Se trata de un artículo de Luis R. Aizpeolea oculto bajo la apariencia de noticia, con su título, su subtítulo, su foto... "Urkullu reclamará a Rajoy que aplique a los etarras la legalidad penitenciaria". "El lehendakari pedirá al presidente un núcleo duro para guiar el fin de ETA". Para engañar a los lectores, Aizpeolea se disfraza de Urkullu y le pide a Rajoy que "en esta nueva fase que se abre del fin de ETA se cumpla la ley, pero también en el aspecto de los beneficios penitenciarios, sin exigir a cambio la disolución ya de la banda terrorista", tanta prisa, córcholis. Ya se disolverán ellos cuando les parezca, hombre. Y si les parece. ¿Será Aizpeolea un portavoz de ETA camuflado? "Pero Urkullu necesita que Rajoy mire menos al sector duro del PP -que encabezan José María Aznar y la FAES, con gran acompañamiento mediático-", dice Aizpeolea endosando al pobre Urkullu sus paranoias personales. "Urkullu", o sea, Aizpeolea, "pedirá a Rajoy un acercamiento de presos de ETA a las cárceles vascas para fortalecer el lento proceso de desmantelamiento de la organización terrorista, cuyo siguiente hito importante será el desarme de la banda armada", que esto lo sabe él pese a que la banda no ha dicho ni pío del asunto. Y exige Aizpeolea-Urkullu a Rajoy que "ponga el acento en el discurso del fracaso de ETA y la victoria de la democracia que neutralice el discurso derrotista del ala dura de la derecha, que hace el juego a la izquierda abertzale" y que el "núcleo duro", distinto del ala dura, debe coordinar "el anunciado desarme de la banda terrorista y su disolución". Cachis, Rajoy leyendo el Gara y resulta que es Aizpeolea el que anuncia la disolución de ETA en El País.

ABC sin embrgo dice que "ETA confirma su intención de liderar una nueva situación política en el País Vasco". "Insiste en que el abandono de la lucha armada es irreversible pero rechaza disolverse", que ya se sabe lo convincente que puede ser apuntar con un arma en la nuca de alguien y nunca se sabe. Rubido es del ala dura fijo, porque dice que "a través de medios afines, los pistoleros de la banda terrorista aseguran que renuncian a la lucha armada, pero no hablan de disolución ni de entrega de armas". Eso sí, el mensaje de Aizpeolea les ha llegado. "El ministro tiene razón en el fondo cuando proclama que ETA ha sido derrotada por la democracia". Qué duro es tu papel Rubido, qué difícil y qué ingrato.

La Razón también es ala dura de Aizpeolea. Y eso que a Aznar últimamente le tienen bastante tirria. "ETA colocará a dirigentes liberados por la Parot en Bildu, Sortu y Amaiur". "Entre los terroristas estarían Kubati, Txikierdi y Mamarru, que ejercerían el control de forma pública o solapada". Mira tú qué mono va a quedar el Congreso, con los escaños llenitos de asesinos. Marhuenda dice que "ETA no habla de su disolución ni de la entrega de las armas, ni de pedir perdón a las víctimas, ni de su disposición a colaborar con la justicia (…) No piensa en un repliegue o en abandonar, sino que está decidida a ser actor principal en lo que está por llegar". Y de la derrota de ETA, nada. "ETA existe, toma decisiones y mantiene capacidad para interferir en los terrenos político, institucional y social". Estos etarras cómo son. Venga a vender que estaban derrotados y ahora vienen con estas, si es que no te puedes fiar de un etarra.

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