El portavoz del Gobierno de Cataluluña, Jordi Turull, ha tratado de dar normalidad a su rueda de prensa de este martes en la sede del Ejecutivo autonómico en Barcelona, aunque en vano.
Al inicio, se limitaba a desgranar los acuerdos ordinarios adoptados, para posteriormente dar paso al turno de preguntas, advirtiendo de antemano que no desvelaría nada del discurso de Carles Puigdemont esta tarde en el Parlamento catalán.
En el toma y daca con los informadores, sin embargo, Turull deslizaba algunas conclusiones. La principal que, en contra del rumor ambiente, no hay divisiones en el frente secesionista: "Somos un bloque". Y la segunda, que el de este martes será un "día histórico" abonando el terreno de la declaración de independencia.
Preocupado por la fuga de empresas
Sobre lo que sí se explaya era sobre el asunto más candente de los últimos días, la máxima fuga de grandes empresas de Cataluña. Algo "preocupante" pero que, a su juicio, no resta un ápice a la "robustez" de la economía catalana, basada, ha llegado a decir, en la pequeña y mediana empresa.
Turull ha acusado al Gobierno de Mariano Rajoy de instigar esta fuga de compañías y ha afirmado enfático que "los que quieren generar una sensación de alarma se equivocan".
En las horas previas al discurso de Puigdemont, su portavoz ha negado validez al documento que la Guardia Civil habría incautado con la hoja de ruta del proceso secesionista, que pasaría por la creación de un plan de agitación paralelo a la declaración de independencia para doblegar al Estado. "Ese no es un documento del Govern" ha asegurado tajante.