
El asalto a las bodegas de Atrio y Coque -dos prestigiosos restaurantes de nuestro país- con diferencia de un año, ha puesto en alerta al sector hostelero de alto nivel. Fuentes policiales consultadas por LD aseguran que "en España no hay mercado" para dar salida a las piezas sustraídas, por lo que la hipótesis más probable es que sean "robos por encargo". Esto no quiere decir que el destinatario final pida unas piezas en concreto, pero sí que habría "una clientela interesada en adquirir" de manera ilegal caldos de lujo y que esto propiciaría los asaltos.
Los compradores -nos apuntan- procederían de lugares donde hacerse con una de estas botellas de lujo no es tan sencillo como tener el dinero suficiente para comprarlas. "Un rico español, que tiene la capacidad de pagar ese dineral por una botella, no necesita comprarla en el mercado negro", añade. Los investigadores creen que estas joyas de ‘oro rojo’ acaban vendiéndose en países como China, Venezuela o México. Obviamente, entre las bandas que ejecutan los asaltos y el cliente final, hay unos intermediarios que son los encargados de realizar la distribución del producto. Aquí es donde "entran en juego las mafias", particularmente las que proceden del gigante asiático.
Muchas de las botellas robadas son auténticas piezas de coleccionista. "Mi instinto me dice que no se han bebido la botella de 350.000 euros", señaló el dueño de Atrio, José Polo, en declaraciones a La Voz de Galicia el 2 de noviembre de 2021. Sólo habían pasado unos días desde que una pareja de ladrones -con cierto carácter pintoresco- perpetrara el robo, pero ya daba por perdida la joya de la corona de su restaurante: el Chateau d'Yquem de 1806, una de las botellas más antiguas y codiciadas del mundo.
La pieza, que se embotelló en tiempos de Napoleón, formaba parte de la historia del establecimiento cacereño. Sus propietarios la adquirieron en una subasta en el año 2.000, a un precio -dicen- no muy elevado. Aquel día, las pujas no eran muy altas. La mala suerte fue que al llegar al restaurante se dieron cuenta de que estaba dañada y tuvo que ser reacondicionada. Una anécdota que hace más de dos décadas se hizo tan famosa como ahora la del atraco perpetrado por la miss mexicana y el delincuente rumano.
Atrio: la miss y el maleante
El restaurante Atrio, con Toño Pérez al frente de sus fogones y dos estrellas Michelín, es uno de los templos de la gastronomía española. Su bodega es considerada una de las mejores del mundo, aunque -todo hay que decirlo- era mejor antes de que el 27 de octubre de 2021 una miss mexicana y un delincuente profesional rumano se llevaran medio centenar de sus mejores botellas. Un robo valorado en 1,6 millones de euros.
A pesar de lo que pudiera parecer, por lo singular de la pareja de ladrones, "los hechos fueron cometidos por dos personas que demostraron estar altamente especializados". Según informa la policía, realizaron el robo "con una planificación milimétrica". La mujer -pudieron comprobar los agentes- se alojó en el Hotel Atrio formalizando la reserva mediante un documento falso suizo.
La noche de los hechos, ella cenó con su cómplice -que no estaba registrado- en el restaurante y después visitaron juntos la bodega. Una deferencia del personal del establecimiento que es habitual con sus clientes. Durante todo ese tiempo, se comportaron como dos huéspedes más. Tras la experiencia gastronómica, subieron a su habitación y -hasta ahí- todo normal.
Un plan minucioso
Más tarde, el hombre abandona la estancia y se dirige al sótano. Para entonces se había hecho con la llave maestra que abre la bodega y en un cortísimo espacio de tiempo salió de ella cargado con tres grandes mochilas, una en cada mano y otra a la espalda. Dentro iban las botellas sustraídas, que habría protegido con algunas toallas de la habitación del hotel.
Lo tenían todo pensado. Según la información facilitada por la Policía Nacional, la mujer distrajo al único empleado que en ese momento podía percatarse de sus movimientos con la excusa de prepararse algo para comer -ya que a esas horas la cocina estaba cerrada-. Entretanto, el varón bajó a la bodega a por las botellas.
El robo fue descubierto a la mañana siguiente, cuando los presuntos autores ya habían abandonado el hotel, llevándose consigo algunas de las piezas irremplazables de la colección de caldos del establecimiento y -con ellas- parte de la historia del mítico restaurante cacereño, que abrió sus puertas en 1986.
Experiencia en robos
Durante las pesquisas, los investigadores descubrieron que los ladrones habían comido en Atrio tres veces en los meses anteriores al robo (en junio, agosto y septiembre), "para hacer un estudio previo del lugar". Fueron identificados gracias a las grabaciones de las cámaras de seguridad, pero -a los pocos días de los hechos- abandonaron España, dificultando así su localización.
Finalmente, les detuvieron cuando intentaban entrar en Croacia desde Montenegro, por el puesto fronterizo de Karasovi Sutorina. Pero ni rastro de las 45 botellas robadas en el restaurante, que pueden continuar escondidas en algún sitio o haber viajado ya a sus lugares de destino. Normalmente -nos explican fuentes policiales- no tardan mucho en deshacerse de este tipo de mercancía, que requiere de ciertos cuidados para que se mantenga en condiciones óptimas.
🚩ÚLTIMA HORA
Detenidos los 2 presuntos autores de uno de los robos más mediáticos de los últimos años
Tras una planificación milimétrica del robo, sustrajeron 45 botellas de vino, valoradas en 1.648.500€, en el restaurante Atrio de #Cáceres pic.twitter.com/19JD1gRhem
— Policía Nacional (@policia) July 19, 2022
En el momento del arresto, el varón -Constantin Gabriel Dumitru, de 48 años- tenía vigentes otras dos órdenes de detención emitidas por Juzgados de Madrid, en relación con el robo de caldos de lujo en establecimientos del exclusivo barrio de Salamanca en Madrid. Uno de ellos, el de una botella de whisky valorada en 5.250 euros que sustrajo en una tienda gourmet (Lavinia, de la calle Ortega y Gasset) en mayo de 2019, y por el que el pasado 8 de noviembre fue condenado a 12 meses de cárcel.
Ella es Priscila Lara Guevara, Miss Earth Estado de México 2016 (cuando tenía 22 años). Desde entonces, ha trabajado como modelo e intentaba abrirse camino en el mundo de la televisión. Pero parece ser que -por la vía legal- no estaba logrando cubrir sus expectativas laborales, y cuando Dumitru se cruza en su camino se pasa al lado oscuro. En las imágenes del robo de Atrio, se aprecia a la perfección el momento en que los dos salen juntos del restaurante con las bolsas.
Coque: ladrones especializados
El restaurante Coque es el resultado de más de 40 años de historia y el trabajo de tres generaciones de hosteleros de la familia Sandoval. En la actualidad, cuenta con un nuevo emplazamiento en el centro de Madrid y dos estrellas Michelín, pero mantiene la esencia de la casa de comidas original, que sus antepasados abrieron en Humanes.
El vino es parte fundamental de la experiencia gastronómica que ofrecen a sus clientes en el establecimiento de la capital. De ahí la dureza del golpe que ha supuesto para ellos la sustracción de 132 botellas de caldos de alta gama -valoradas en 175.000 euros- el pasado 31 de octubre. De nuevo tenemos que hablar de piezas irremplazables.
La Policía Nacional es prudente a la hora de dar información acerca de este robo, ya que la investigación continúa abierta y los autores aún no han sido detenidos. Lo que sí ha trascendido es que los ladrones eran expertos en la materia. Desactivaron la alarma -que no sonó- con un método de precisión, como los inhibidores de frecuencia.
Todo apunta a que el asalto a la bodega del restaurante madrileño fue perpetrado por una organización criminal especializada. El robo, que cometieron por la noche -cuando el establecimiento estaba cerrado-, no se descubrió hasta el día siguiente. Las grabaciones de las cámaras de videovigilancia del restaurante y los alrededores están siendo clave en la investigación.
Los asaltantes accedieron al restaurante de los hermanos Sandoval con una radial a través de una farmacia que estaba cerrada desde hacía algún tiempo y se comunicaba con el restaurante a través de un patio interior. Una vez ahí, los ladrones tuvieron prácticamente vía libre. Entraron por una puerta trasera al local, rompieron el cristal de la bodega y sustrajeron el botín.
¿Dónde está el vino?
Se llevaron algunas de las piezas más valiosas de ‘La Sacristía’, como los propietarios del establecimiento llaman a su bodega. Es una de las más importantes de España por el enorme valor de los vinos que almacena, alrededor de 25.000 botellas. Esto la hace muy atractiva para bandas organizadas dedicadas al robo de artículos de lujo.
A la vista está que los detenidos por el robo de Atrio -como mínimo- también pusieron sus ojos en el restaurante Coque, donde estuvieron justo unos días antes de perpetrar el asalto al establecimiento cacereño. Cuando les arrestaron en julio, los hermanos Sandoval confirmaron que Constantin y su pareja habían comido allí unos días antes de los hechos. Según relataron entonces, hicieron muchas preguntas sobre las botellas de su bodega y "parecían expertos en vinos".
Por algún motivo, finalmente fijaron su objetivo en Atrio. O dejaron el robo del restaurante madrileño para más adelante y su detención lo frustró. Pero otros estuvieron más rápidos. Durante el puente de Todos los Santos, ‘La Sacristía’ fue desvalijada. Afortunadamente no se llevaron su valiosa damajuana de Trafalgar de 1805, única en el mundo. No obstante, entre las piezas sustraídas hay auténticas joyas de ‘oro rojo’ que -de momento- no se han podido recuperar. La hipótesis que ha cobrado más fuerza es que se pueden haber vendido en el mercado chino.

