Rosa Díez enumera en #OrganizandoLaResistencia de Es la Mañana de Federico las diferencias y similitudes entre el golpe de Estado perpetrado por Pedro Castillo en Perú con el que está dando, "a plazos", Pedro Sánchez en España. Castillo intentó disolver las Cortes y gobernar por decreto, "es algo que ya pasa en España, la acumulación de reales decretos de este Gobierno es algo inaudito en la historia de nuestra joven democracia".
La primera similitud, ha subrayado Rosa Díez, "es que tanto en Perú como en España el golpe contra la democracia lo impulsa el Gobierno con el presidente a la cabeza". Sin embargo, hay una gran diferencia, el comportamiento de los legisladores, es decir, de los diputados en el caso español.
"En Perú la mayoría de los legisladores se han puesto del lado de la democracia y han derrocado al golpista, mientras que en España se han puesto de parte del golpista y están votando a favor de las leyes de desconexión de la democracia y la Constitución". Por ejemplo, con la legalización de la sedición y malversación, "ya sea para organizar un golpe de Estado o una trama corrupta para comprar votos y que el PSOE se perpetúe en el poder".
De hecho, Rosa Díez ha querido tener una mención especial para esos barones del PSOE tan incómodos supuestamente con lo que está haciendo Sánchez, "hay diputados de esas comunidades autónomas que van a votar a favor del golpista, del golpe y de sus decisiones que tienen como objetivo deteriorar las instituciones y a la propia democracia". Por tanto, "son todos cómplices de la trama". Mientras que en Perú el golpe se frena, en España progresa adecuadamente gracias a la complicidad del PSOE y de sus representantes".
Otra gran diferencia es la forma de llevar a cabo el golpe de Estado. Pedro Castillo "es más primario y lo ha hecho de golpe y ha habido una reacción". Sin embargo Pedro Sánchez "lo está dando en cómodos plazos y los ciudadanos no salimos a la calle a defender las instituciones".
Expulsión de los críticos
Sobre la negociación con ERC para "el abaratamiento de la malversación y la legalización de la sedición" es algo que Sánchez "ha venido poniendo en práctica". Anteriormente "lo hizo con con Bildu, yo te mando los presos, tú lo sueltas". Ahora lo hace con ERC a cambio "de que presenten una enmienda para que no tenga que meter en la cárcel o indultar a Griñán y no tener ese desgaste electoral".
Pero como "Pedro Sánchez es un perverso", la jugada de salvar a Griñán a través de ERC tiene un trasfondo. Sánchez "odia a los históricos del PSOE y ha conseguido con esa enmienda que el nombre de Griñán, y de los históricos del PSOE, quede unido para toda la vida con la malversación y con los golpistas de Cataluña".
Pero sin duda a los históricos que más odia Pedro Sánchez son "los que son fieles a la tradición democrática del PSOE". Por ejemplo, Joaquín Leguina, recientemente expulsado del partido. Rosa Díez ha recordado la importancia de Leguina dentro del PSOE, "ganó tres veces por mayoría absoluta en la Comunidad de Madrid". Como buen demócrata, Leguina siempre "ha sido un hombre que ha levantado la voz en defensa de las libertades y de la democracia".
Con la expulsión de Leguina el día de la Constitución y las formas de la misma, mediante un burofax, "Sánchez no solo demuestra tener cada vez menos pudor en enseñar su catadura política y moral, sino que expresa brutalmente que no va a permitir la menor discrepancia en el seno del PSOE".
Se trata, ha añadido Rosa Díez, "de un aviso para navegantes, que no va a consentir la menor oposición interna contra la liquidación de lo que algunas almas cándidas del PSOE creen que queda del viejo PSOE". Por eso "Sánchez los quiere a todos fuera y con el sambenito de traidores". En el actual PSOE "quieren a Otegui y odian a Ayuso, o sea, les gusta más ETA que el Partido Popular", ha concluido Rosa Díez.