
TVE decidió emitir un reportaje previo al discurso del Rey en el que incluyó los escándalos de Juan Carlos I. La televisión pública lo hizo justo en los minutos finales de ese reportaje y, por lo tanto, justo antes de que el Rey y Jefe del Estado, Felipe VI, iniciara su discurso de Nochebuena a todos los españoles. Es decir, que programó los escándalos del emérito en los minutos en los que más audiencia sabía que tendría.
El discurso de Felipe VI estuvo cargado de peticiones de respeto hacia la Constitución Española, de exigencias de fidelidad a los cauces democráticos y de defensa de la instituciones -en estos momentos, bajo amenaza por lo continuos ataques del Gobierno de Pedro Sánchez-. Pero la Casa Real incluyó, además, una selección de fotografías que se emitieron nada más terminar el discurso y mientras sonaba el himno de España. Unas fotografías plenamente expresivas y cargadas de mensajes muy claros: el cariño de la población por los Reyes, por la Princesa de Asturias y la infanta Sofía, el respeto de las dos hijas de Felipe VI por la bandera y el papel ya claramente institucional de la Princesa Leonor.Todo un guiño de cariño popular hacia los Reyes y su familia y de sucesión garantizada por muchos ataques que haya a la Corona.
Las fotografías que muestra en esta galería Libertad Digital fueron las emitidas mientras sonaba el himno de España nada más terminar el discurso de Felipe VI. Todas ellas retratan con claridad a una familia y un Rey queridos por la gente y en plena actividad. Acogidos con cariño por la misma gente que no deja de abuchear a Pedro Sánchez en cuanto pisa la calle.
Esas fotografías muestran igualmente imágenes institucionales de la Princesa de Asturias en plena función dentro de la representación de España y de su propia dinastía. Y muestran igualmente a una familia en plena labor conjunta, por mucho que la izquierda haya decidido reservar para la Corona un papel prioritario en su ataque a las instituciones.
Y es que las fotos representaban a la perfección el discurso que el propio Felipe VI emitió para todos los españoles en la reciente Nochebuena. Un discurso cargado de mensajes en defensa de España, la Constitución, la democracia y las instituciones.
Así, en su discurso, el Rey aseguró que "además de creer en nosotros mismos, en nuestra capacidad, necesitamos –siempre, pero más aún en tiempos difíciles– el mayor compromiso de todos con nuestra democracia y con Europa, con la Unión Europea, que son las dos columnas vertebrales sobre las que se asientan nuestro presente y nuestro futuro".
Felipe VI añadió que "las democracias en el mundo están expuestas a muchos riesgos que no son nuevos; pero cuando hoy en día los sufren, adquieren una particular intensidad. Y España no es una excepción".
El Rey destacó que "hay tres sobre los que quiero detenerme porque me parecen muy importantes: la división es uno de ellos. El deterioro de la convivencia es otro; la erosión de las instituciones es el tercero. Un país o una sociedad dividida o enfrentada no avanza, no
progresa ni resuelve bien sus problemas, no genera confianza. La división hace más frágiles a las democracias; la unión, todo lo contrario, las fortalece".
Felipe VI explicó que "en España lo sabemos por experiencia propia. Nuestra Constitución, fruto del diálogo y del entendimiento, representa la unión lograda entre los españoles, como apuesta de futuro, de diversidad y de concordia, para una joven democracia. Hoy, con el paso de todos estos años, nuestros valores constitucionales están enraizados en nuestra sociedad; y son por ello la referencia donde los españoles debemos seguir encontrando la unión que nos asegura
estabilidad, cohesión y progreso. Y que nos garantiza una convivencia que, como he destacado a menudo, es nuestro mayor patrimonio".
El Rey prosiguió señalando que "una convivencia que requiere en nuestra vida colectiva el reconocimiento en plenitud de nuestras libertades, junto al respeto y la consideración a las personas, a sus convicciones, y a su dignidad. Que necesita guiarse por la razón; que demanda anteponer la voluntad de integrar frente al deseo de excluir. En esa tarea, necesitamos fortalecer nuestras Instituciones. Unas Instituciones sólidas que protejan a los ciudadanos, atiendan a sus preocupaciones, garanticen sus derechos, y apoyen a las familias y a los jóvenes en la superación de muchos de sus problemas cotidianos. Instituciones que respondan al interés general y ejerciten sus funciones con colaboración leal, con respeto a la Constitución y a las leyes, y sean un ejemplo de integridad y rectitud. Y este es un propósito diario con el que las Instituciones debemos estar siempre comprometidas".
Felipe VI añadió también que "no podemos dar por hecho todo lo que hemos construido. Han pasado ya casi 45 años desde la aprobación de la Constitución y claro que han cambiado, y seguirán cambiando, muchas cosas. Pero el espíritu que la vio nacer, sus principios y sus fundamentos, que son obra de todos, no pueden debilitarse ni deben caer en el olvido. Son un valor único en nuestra historia constitucional y política que debemos proteger, porque son el lugar donde los españoles nos reconocemos y donde nos aceptamos los unos a los otros, a pesar de nuestras diferencias; el lugar donde hemos convivido y donde convivimos en libertad"

