Los alrededor de 400 habitantes de la pedanía de El Paraje, en el municipio murciano de Alguazas, están absolutamente conmocionados por el fallecimiento de Josefa Bravo. Una vecina nonagenaria que ha muerto este domingo como consecuencia de las heridas que le ocasionaron dos cachorros de american stanford que la atacaron el martes por sorpresa cuando se disponía a alimentar a unos gatos en la puerta de su casa.
Según relatan a Libertad Digital fuentes cercanas a la investigación, "los perros del vecino se escapan, se chocan con la mujer, la tiran al suelo y le muerden en varias partes del cuerpo". Los guardias civiles que se desplazaron al lugar y otras personas que se encontraban allí tuvieron que intervenir para que los canes permitieran a los sanitarios pudieran asistirla. "No dejaban que nadie se acercara", nos explican.
"Al final, entre todos consiguieron calmarles", añade. Especialmente gracias a la colaboración del padre del propietario de los animales. De esta manera, los servicios de emergencias pudieron llegar hasta la mujer, víctima del brutal ataque y darle una primera asistencia en el lugar. Después "dada la gravedad de las heridas, fue trasladada a un hospital de la capital, donde quedó en observación". Allí ha muerto este domingo.
La investigación, realizada de manera conjunta por Guardia Civil y Policía Local, ya ha dado sus primeros resultados. Los american stanford (como se conoce comúnmente a los american staffordshire terrier) "carecían de microchip y de cartilla de vacunación, y no estaban en el censo requerido para este tipo de perros". Ahora los agentes siguen trabajando para esclarecer las circunstancias de los hechos.
La responsabilidad del propietario
Sin duda, una de las incógnitas que deben despejar es la que tiene que ver con la responsabilidad que pudiera tener el amo de los animales en el trágico desenlace. Por lo que han podido saber, "el verdadero dueño de los perros está fuera de casa todo el día" y es el padre de éste el que suele hacerse cargo de los canes.
"De hecho, es el padre del supuesto propietario el que llega al lugar cuando ocurre todo", añaden, "y después aparecieron otros familiares". Otras fuentes próximas al caso informan a este periódico de que el dueño es un chico joven que "apenas ha hecho declaraciones" y que tiene otros dos perros adultos de la misma raza en la vivienda.
Ni chip, ni censo, ni licencia
Desde el Ayuntamiento de Alguazas tachan los acontecimientos de "inadmisibles" y afirman que "la irresponsabilidad de unas personas en el cumplimiento de las normas sobre la tenencia de animales ha provocado un daño que es irreparable".
En un comunicado emitido este domingo, se recuerda además que "los perros deben tener implantado su microchip, deben tener al día sus vacunas, estar censados en el consistorio y nunca pueden estar sueltos en la vía pública.
Asimismo, insisten en que es obligatorio que "en los perros declarados PPP se disponga de licencia para su tenencia y un seguro de responsabilidad civil". Los animales que atacaron a la fallecida no cumplían ninguno de los requisitos.