Es una batalla constante con final abierto, pero la guerra contra la piratería comienza a dar resultados. La Guardia Civil ha anunciado el desmantelamiento de Cristal Azul, un popular addon de Kodi que permitía acceder ilegalmente a retransmisiones de fútbol, incluyendo partidos de la liga española. La operación, bautizada como "Corsario Azul", se inició tras una denuncia presentada por LaLiga y Movistar, y ha culminado con la detención del desarrollador de 37 años detrás de esta extensión.
El addon, que dejó de funcionar el pasado octubre con un mensaje en su canal de Telegram que anunciaba su cierre "de manera inmediata y para siempre", llegó a ofrecer retransmisiones en directo a más de 78,000 usuarios simultáneos. Según las estimaciones de LaLiga y Movistar, el fraude causado asciende a 42,5 millones de euros, una cifra basada en los daños provocados por el acceso gratuito a contenido protegido por derechos.
Una operación meticulosa
La identificación del responsable se logró tras analizar los "nickname" presentes en el código fuente de la extensión, lo que permitió a los agentes del Equipo de Investigación Tecnológica (EDITE) rastrear al autor. Además del arresto, se han eliminado el código del addon y varios canales de Telegram relacionados con la actividad ilegal. Esta operación se suma a otros esfuerzos recientes, como el cierre de Magis.TV, una IPTV popular en Latinoamérica, en la que LaLiga también estuvo involucrada. Este caso, ocurrido en septiembre, el balance fue de cinco detenciones y el desmantelamiento de 675 sitios web.
¿Qué riesgos corren los usuarios?
Más allá de posibles multas, los espectadores que utilizan plataformas piratas se exponen a riesgos tecnológicos y económicos. Muchas de estas aplicaciones y servicios pueden contener malware o ser utilizadas para robar datos personales y bancarios. Según desveló el presidente de LaLiga, Javier Tebas en una entrevista en la revista Forbes, las primeras multas por consumir futbol en plataformas ilegales ya han llegado a los infractores. Hablamos de sanciones que alcanzan los 450 euros. En un comunicado reciente, LaLiga advirtió que continuará trabajando para desmantelar redes ilegales y proteger la industria.
La desarticulación de Cristal Azul representa un nuevo avance en la lucha contra las retransmisiones "pirata", que afectan gravemente a las empresas audiovisuales y a la industria del deporte en España.