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El juez da por probado que Presidencia hizo gestiones para distribuir en prensa la filtración sobre el novio de Ayuso

Para el Supremo, queda claro que desde el Gobierno se hicieron gestiones para la publicación en prensa del correo mostrado posteriormente por Lobato.

Declaración fiscal general del Estado | Europa Press

La declaración del fiscal general imputado por las filtraciones no parece llevar camino de librarle. Y no parece que vaya a ayudarle, ni a él, ni a "Presidencia". Y es que el Tribunal Supremo mantiene una serie de conclusiones que ponen en el foco del caso a "Presidencia" del Gobierno. Es decir, al organismo que encabeza y personaliza Pedro Sánchez.

Para el Supremo, queda claro y probado que desde "Presidencia del Gobierno se hicieron gestiones" para la publicación en prensa del correo de 2 de febrero de 2024 remitido en el contexto de la conversación entre el abogado de Alberto González Amador y el fiscal.

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Juan Lobato tapó los datos personales

El Supremo, de hecho, ha tomado nota de un hecho desvelado por Libertad Digital. Y es que ese correo aparece, pero con los datos personales tapados, en la Asamblea de Madrid, mostrado por Juan Lobato.

Y, ¿por qué lo exhibe él con los datos tapados? Pues porque Lobato -de formación, técnico de Hacienda- sabía que el contenido desvelado era delictivo por el carácter secreto de la información fiscal. Pero la realidad, como ha certificado ya el Supremo y anticipó este diario mostrando las fotografías que lo acreditaban, es que el envío de Moncloa no contenía esos datos tapados o, dicho de otra manera, era la filtración original.

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Violación de secretos e implicación del Gobierno

Para el Supremo la violación de secretos debe interpretarse en su literalidad, tanto para datos puramente secretos como informaciones sujetas, por su propia naturaleza, al deber de confidencialidad o reserva. Y eso incluye los datos fiscales y al uso de ellos por el propio Gobierno.

De hecho, el último auto del juez Hurtado ya señalaba que, en base a ello, "la acción delictiva puede tener lugar en relación con la divulgación de secretos en su sentido propio, como sobre informaciones reservadas concernientes a hechos que se conocen por razón de la función o cargo".

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Hechos probados por el Supremo

De ese modo, el Supremo da por probados distintos hechos. El primero la filtración, "con salida de la Fiscalía General del Estado y destino Presidencia del Gobierno", efectivamente fue usado políticamente y publicado pese a incluir datos secretos.

El segundo, que Presidencia del Gobierno hizo gestiones para la publicación en prensa del citado correo de 2 de febrero de 2024 con datos confidenciales.

Y tercero, que hay una base indiciaria que delata la "relevante participación" del fiscal general "en esa filtración, en la medida que fue la persona que dirigió los pasos que llevaron a ella, aprovechando la situación de superioridad que ostentaba sobre otros fiscales, que se prestaron a ponerse a su disposición, y esto solo cabe entenderlo desde su posición de preeminencia por ser superior jerárquico de todos ellos", como señalaba aquel auto citado del juez Hurtado.

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